Gonzalo Castro, capitán de Nacional, se prepara de cara a lo que viene y sin saber a ciencia cierta cuándo volverá el fútbol. "El profe sigue mandando rutinas más tranquilas, con menos peso y menos carga. Yo como tengo la costumbre de hacerlo de mañana, está bueno no perder esa rutina que para la cabeza es fundamental", contó al programa 100% Deporte, de Sport 890.
"Justo esta semana los profes dejaron que cada uno trabaje a su manera y nos liberaron, porque puede ser que en dos o tres semanas pueda moverse alguna pieza y haya expectativas de arrancar. Desde que empezó todo esto no habíamos parado y seguimos entrenando lunes, miércoles y viernes con los profes, y martes y jueves nos mandaban los trabajos y los hacíamos a conciencia y cada uno a su manera", explicó.
"Por más que uno siga entrenando, no es lo mismo. Los profes de Nacional han intentado que no perdamos musculatura, aunque creo que de lo aeróbico algo se va a perder. Lo importante es que sea lo menos posible para cuando esté el grupo trabaje Gustavo, que es a quien más difícil se le ha hecho. Hemos hecho charlas y han servido. Por más que jugamos pocos partidos se han visto y recalcado errores para que cuando volvamos, podamos mejorar eso", agregó.
El clásico: "Capaz que a algunos muchachos les juega a favor que sea sin público"
Sabe que la vuelta al fútbol será sin público y que "el ambiente cambia un montón", pero advierte que "a la hora de jugar tenés que saber lo que te estás jugando". A veces el público te puede llevar un partido hacia un lado o hacia otro, como cuando te hacen un gol tu gente empieza a cantar y te puede enchufar en el partido", reconoció.
"Se viene un clásico, y con gente o sin gente la responsabilidad y la presión es la misma. Capaz que el entorno te choca un poco, pero cuando empieza a correr la pelota tenés que olvidarte rápido de eso porque lo que sirve es ganar y no hay más historia. Sería muy extraño. Tal vez con algún otro equipo hemos jugado en prácticas, pero contra Peñarol ni eso", expresó.
"La obligación para nosotros será la misma con o sin público. No será fácil conectarse en el partido, pero capaz que a algunos muchachos les juega a favor. Capaz que ver un estadio lleno los cohíbe y se sienten mejor sin gente. Espero que a mí me juegue a favor y que sea un buen partido", agregó sobre el duelo previsto para la cuarta fecha del Apertura ante Peñarol.
La vuelta entre la salud y las lesiones
Castro sabe que hay más posibilidades de que haya lesiones si se comprime el calendario entre agosto y diciembre "porque cuando más jugás, más riesgo de lesión hay". "Ahí Nacional, Peñarol y algún otro equipo con planteles amplios pueden tener ventaja por poder ir mechando jugadores y dar respiro a los titulares en vez de usar a los mismos 11, 13 o 14 jugadores en un campeonato. La parte física y la psicológica es fundamental y volver a conectar la cabeza con el físico no es fácil", reveló.
En cuanto a la seguridad que brindan los protocolos sanitarios, fue claro: "Si el fútbol tiene que volver, que vuelva, pero con la seguridad para todos. Porque después jugás contra un equipo que también tiene todo un personal atrás. Pueden contagiarse dos equipos y generar a nivel mediático un problema importante. No es decir 'que vuelvan a jugar y si pasa algo, pasa'".
"El problema es que en Uruguay, de política y de fútbol todos sabemos y opinamos, y tienen un gran impacto. Por eso se están tomando estas medidas para llevarlo con calma y volver con toda la seguridad. Yo como jugador lo agradezco porque quiero las mejores condiciones para volver y que no sea una monedita al aire", concluyó.