La primera fecha del grupo B de la Champions League, probablemente el más difícil de pronosticar en cuanto a sus posiciones finales, se puso en marcha con un partidazo en Anfield Road y otro que decepcionó en el Wanda Metropolitano.

En la capital española empataron 0-0 Atlético de Madrid y Porto en un partido muy pobre, luchado y friccionado. José María Giménez y Luis Suárez jugaron los 90 minutos en el conjunto colchonero, que luchó muchísimo y casi no generó peligro, ni siquiera con el ingreso de Antoine Griezmann. Apenas un derechazo de Ángel Correa que tapó el arquero Diogo Costa.

Los portugueses estuvieron más cerca de ganarlo. A los 50’ un centro de Otávio que se cerró y sorprendió a Jan Oblak dio en el caño, y a los 80’ el VAR salvó al elenco de Simeone. Tras un error compartido entre Oblak y Kondogbia anotó Mehdi Tarami, pero a instancias de la tecnología se invalidó la conquista al detectarse un roce en la mano del delantero iraní.

Por el mismo grupo, Liverpool picó en punta al doblegar al Milan 3-2 en un partidazo que empezó ganando a los 9’ gracias a un autogol de Fikayo Tomori y que terminó perdiendo 1-2 al cabo del primer tiempo por los tantos de Ante Rebic a los 42’ y Brahim Díaz a los 44’. Mohamed Salah empató a los 48’ y un bombazo de Jordan Henderson a los 69’ selló el 3-2.