Una situación diferente se vivió durante el homenaje que se realizó a Luis Suárez en su despedida de la selección uruguaya y que no pasó desapercibida.
Mientras existía un clima de fiesta y alegría, todo eso cambió rotundamente cuando los presentadores del evento anunciaron al presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol, Ignacio Alonso, y al representante de la Conmebol, Nery Pumpido.
El exarquero argentino, campeón del mundo con su selección en 1986, sustituyó con su presencia al presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez, de quien se había dicho que viajaría a Montevideo y finalmente no lo hizo, un día después de haber sido protagonista en el homenaje a Ángel di María.
Allí el Centenario, que contó con entradas agotadas, dejó de retumbar con aplausos y se transformó en una gran silbatina que rompió la tranquilidad de la noche.
Pumpido y Alonso entregaron al Pistolero una réplica de la Copa América que obtuvo el delantero en la edición del 2011 en Argentina y que el salteño presentó ante los hinchas.
Instantes después, cuando se retiró Pumpido, se convocó a otros de los integrantes del Comité Ejecutivo de la AUF para continuar con el acto homenaje y los silbidos volvieron a reiterarse.
Escuchen a la gente!
— Sin Falta (@SinFaltapy) September 7, 2024
Por este motivo no fue @agdws al Centenario, no fue porque no lo invitaron como dijo su amigo @nachoalonso33
Envió al pobre Pumpido que jamás en su carrera habrá sido silbado así.
Era Justo y necesario. pic.twitter.com/hPJmBVCq9C