Marruecos clasificó a los cuartos de final de la Copa del Mundo y será rival de Portugal o Suiza el próximo sábado a las 12 horas de Uruguay. Tras empatar sin goles en el tiempo regular, se impuso a España 3-0 en la tanda de penales, dando la primera gran sorpresa de los octavos de final.
El conjunto africano mostró desde el arranque su característico 4-1-4-1, a partir del cual quitó espacios a su rival e intentó salir rápido de contragolpe. Con Hakim Ziyech y Sofiane Boufal complicando por las bandas, avisó por primera vez a los 11’ con un tiro libre de Achraf Hakimi que pasó muy cerca.
Boufal complicó encarando a Marcos Llorente, improvisado lateral derecho que la pasó mal en el conjunto español. La respuesta de la Roja, en su situación más clara del tiempo regular, fue un mano a mano que Marco Asensio definió mal cuando tenía pase al medio para Ferrán Torres a los 26’.
Marruecos, que solo por momentos adelantó el bloque de presión, robó en campo rival a los 33’, cuando Noussair Mazraoui recuperó y exigió a Unai Simón desde afuera con un potente zurdazo. Nueve minutos después se perdió el tanto Naif Aguerd conectando un cabezazo desviado tras centro de Boufal.
En el complemento, España siguió tocando para los costados y se plantó con más decisión en campo rival, pero casi sin rematarle a Yassine Bounou. El arquero del Sevilla despejó un tiro libre de Dani Olmo a los 54’ y no volvió a usar los guantes hasta la última jugada del tiempo regular, cuando despejó otro tiro libre del propio Olmo.
Marruecos, con gran concentración defensiva y aplicación táctica, supo taparle las bandas al elenco de Luis Enrique, aunque con el pasar de los minutos fue perdiendo capacidad contragolpeadora. El desgaste realizado en su campo le impidió salir con resto físico cuando intentó plantarse en territorio adversario.
Las piernas empezaron a pasar factura de los dos lados en el alargue, y si bien Luis Enrique movió piezas para revitalizar el ataque, no lo logró. Los de Walid Regragui siguieron bien parados atrás y hasta tuvieron un mano a mano muy claro en los pies de Walid Cheddira a los 13’, luego de un gran pase de Azzadine Ounahi, pero se agigantó Unai Simón para evitar el 1-0 marroquí.
Sin que pudieran romper el cero y con una situación clarísima de Pedro Sarabia que dio en el caño en la última jugada de la prórroga, llegaron a los penales. En la definición, España falló sus dos primeros disparos y siempre corrió de atrás. Pablo Sarabia estrelló el suyo en el caño y Bounou tapó el de Carlos Soler. Unai Simón contuvo el de Badr Banoun, pero Bono se quedó con el de Busquets y dejó el triunfo en los pies de Hakimi, quien no falló al picarla y selló el 3-0.