Alemania derrotó 4--2 a Costa Rica en un duelo plagado de emociones, pero la derrota de España ante Japón terminó condenando sus chances de llegar a octavos de final y ambos quedaron eliminados.
El partido comenzó con los teutones saliendo a ser protagonistas y con un planteamiento muy ofensivo, que en un par de oprtunidades exigió a Navas con sendos remates de Musiala y Gnabry.
Y esa búsqueda tuvo su premio a los diez minutos, cuando un desborde de Raum por izquierda terminó en un centro que cabeceó Serge Gnabry por el centro para inflar las redes y poner el 1-0.
Keilor Navas, con sus intervenciones, se encargó que las diferencias no se acrecentaran, principalmente tras otro testarazo, ahora de Goretzka, que obligó al golero a entrar en acción.
Tiempo después nuevamente fue exigido, ahora ante un disparo de media distancia de Kimmich, el cual logró contener en dos tiempos.
Sobre el cierre de esa primera etapa, una pelota que perdión Raum le dio la gran chance a los Ticos del empate, pero el zapatazo de Keysher Fuller encontró un manotazo salvador de Neuer, para mantener el 1-0 con que se fueron al descanso.
De locos
El complemento se inició y los goles de Japón que pasó a vencer a España en el otro partido del grupo, hicieron que los teutones quedaran, de momento, eliminados del Mundial, algo que los obligó a arriesgar mucho más buscando ampliar la diferencia.
Pero si faltaba un agregado apareció a los 58' tras una contra espectacular que comenzó Waston, terminó en un centro que cabeceó Campbell, Neuer tapó dando rebote y Yeltsin Tejada lo aprovechó para el sorpresivo 1-1.
Un golpe durísimo para los teutones que tuvieron dos claras para anotar con disparos de Musiala primero y Rudiger después que se estrellaron en el travesaño, cuando la tensión era máxima.
A los 67' se dio otra acción repetida hace instantes, Musiala probando de media distancia y el palo izquierdo que se encargó de repeler la pelota.
El sismo tico se terminó de concretar a los 68' tras una pelota quieta que pelearon en el área y Juan Pablo Vargas terminó tocando para el impensado 2-1, que no solo le daba la clasificación a los de Luis Fernando Suárez, sino que eliminaba a su rival y a España que perdía.
Terremoto para los europeos que revivieron a los 72' cuando Füllkrug puso un pase medido entrelíneas que recepcionó Kai Havertz y definió con calidad para el 2-2.
Y fue el propio Havertz que apareció a los 84' para poner el tercero a pase de Gnabry y revertir una vez más el resultado, pero por el resultado en la otra cancha, aún quedando eliminado.
El cuarto llegó a los 89' con un pase largo para el pique de Sané que habilitó a Niclas Füllkrug que pateó y puso el 4-2 que terminó de sentenciar el partido.
El pitazo final selló el resulatdo, al igual que se concretó la victoria de Japón sobre España, algo que los dejó afuera a los teutones, una de las decepciones del Mundial.