Hugo Lloris, golero y capitán de la selección francesa, aseguró, tras derrotar a Marruecos (2-0) en el estadio Al Bayt, que el domingo “será una gran final” de la Copa del Mundo.
“Argentina es un gran equipo, que tiene un jugador que ha marcado la historia de este deporte [Lionel Messi], pero nosotros tenemos argumentos”, apuntó el meta del Tottenham inglés, clave en la victoria sobre el cuadro marroquí.
Admitió, asimismo, que en la semifinal habían “sufrido mucho” ante el acoso de su rival, pero que salen “satisfechos por el trabajo realizado”, lo que les permite “tener una oportunidad de oro para que la selección francesa pase a la historia del fútbol”.
“Fuimos fuertes, sufrimos cuando tuvimos que hacerlo, aunque no todo fue perfecto. Tendremos que presentar todos nuestros mejores argumentos el domingo”, apuntó Lloris.
Vale una final
El lateral francés Theo Hernández dijo, por su parte, que: “Es increíble jugar dos finales de la Copa del Mundo seguidas, hicimos un gran trabajo. [La final] es un gran juego, trabajaremos mucho para ganarla”.
Hernández, de 25 años, recordó a su hermano Lucas, quien se lesionó de gravedad en la rodilla derecha en el debut mundialista de Francia (victoria 4-1 ante Australia). Lucas, del Bayern Múnich, era el titular en la banda izquierda.
“Espero que mi hermano esté allí para la final”, señaló el defensor del AC Milan. Al derrotar al equipo revelación del certamen, Francia se clasificó a su cuarta final de una Copa del Mundo, tras las de 1998, 2006 y 2018.