El delegado de Montevideo Wanderers Carlos Ham analizó el presente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), las elecciones del próximo 16 de febrero, la candidatura de Pablo Ferrari y la gestión actual a cargo de Ignacio Alonso.
“Apostamos a algo diferente”, comenzó diciendo Ham, integrante del grupo de clubes profesionales que impulsa la candidatura de Pablo Ferrari, entrevistado en el programa Tirando paredes de YouTube, y continuó: “Es una persona que no está contaminada con el día a día, que viene de afuera, capaz de componer una división grande que se vive en la Asociación. Es un excelente administrador, que es lo que precisa la AUF al futuro, con 30 años en el deporte, y puede arrimar votos de otros lugares diferentes de los que manifestamos nuestra disconformidad con la candidatura de Alonso”.
Sabe que hoy en día y con las cartas vistas, es el candidato oficialista el que está en la delantera rumbo al sillón presidencial, y mencionó: “Ferrari tiene que remontar una elección que viene siendo, hoy en día, favorable Alonso, pero quedan varios días para reunirse con clubes o grupos de interés para que apoyen nuestra postura, y apostamos a revertir esta situación”.
Y dijo sobre la decisión que hizo pública el club tricolor de votar a Alonso: “Soy consciente que se les ofrecieron distintas posibilidades para tener una corriente más grande entre ellas, que postularan un hombre de Nacional con credenciales, que los hay y muchos, pero no prosperó. No está bueno no tenerlos apoyando esta postulación, pero era algo que sabíamos podía pasar”.
La gestión Alonso
Carlos Ham, a la hora de referirse a Ferrari y algunas de sus valencias, mencionó: “Él va a gestionar la AUF y lo hará de una manera imparcial, formando un equipo con gente de su confianza y con lugar para todos los que lo apoyaron y no. Queremos que se gobierne con equidad y prudencia. Eso es lo que manifestamos a los demás votantes, ya que es lo que Pablo representa”.
“La AUF, en el ultimo año, presentó un balance con ingresos de casi 25 millones de dólares, un 50% por arriba de lo anterior”, dijo al analizar la gestión del ciclo de Ignacio Alonso, y agregó: “Eso marca un notorio aumento de ingresos. Lamentablemente, en costos también presentó un aumento pero del 60%”.
“Cuando uno analiza en qué se gastó, hay ítems con cifras muy altas que no aportan al fútbol. Los costos treparon a 23 millones, por lo que la utilidad final fue de dos millones de dólares”, dijo, y aclaró: “No está mal que la AUF no tenga utilidades porque no es una organización con fines de lucro, el tema es cómo se gasta ese dinero”.
“Si se observa la realidad de las instituciones, está cada vez peor. Hay una Asociación que tuvo ingresos récord, pero gasta muchísimo dinero y eso no derrama a los clubes y la estructura del fútbol: infraestructura, capacitación y modernización, trabajar en los costos de los espectáculos que se dispararon, etcétera”, manifestó.
“Los clubes profesionales, salvo Nacional y Peñarol, presentan déficits por jugar, es una realidad que no se encaró con la profundidad que se debería haber abordado”, dijo, y fue a más: “La AUF tiene que ser equitativa en la administración de dineros de terceros, tiene que haber políticas, una estrategia, y se debe ser muy claro a la hora de asignar esos recursos”.
Y terminó haciendo referencia al dinero que percibe el presidente por ostentar ese cargo: “Es un tema urticante y ha sido una de las píldoras venenosas del fútbol. Esa cantidad de dinero que paga FIFA y Conmebol hace que estés subordinados a ella y a veces sea difícil distanciarte a la hora de defender a tus asociados, que fueron los que te eligieron”.