Pese a ser el campeón del Torneo Apertura y líder de la Tabla Anual, Peñarol se encuentra inmerso en un momento complicado, sin entrenador y con problemas políticos internos que sacuden a la institución. De todo eso y más opinó Carlos Bueno, exjugador del club, en diálogo con el programa Quiero fútbol de radio Sport 890.
Con respecto al posible sustituto de Alfredo Arias, comenzó: “Siempre va a estar el nombre de Mario [Saralegui], eso es indiscutible, pero creo que no lo han llamado todavía. Él se alegrará mucho, pero en esta Comisión que hay no tiene mucho feeling”. Bueno actualmente es el ayudante técnico de Saralegui en Artigas, de la Primera División Amateur. “Es un momento para calmar a la gente porque hay un tema político interno impresionante. Darío [Rodríguez] conoce el club, sería bueno tener uno de la casa”, siguió.
“Ojalá supiéramos” qué se hace mal, “así se resolvería de una vez”. “Estoy seguro que vamos a mejorar. Ganamos el Apertura, pero hicimos una Copa muy mala que le costó la cabeza al entrenador. Cuando el tema deportivo no funciona, la cabeza del técnico es la primera que vuela”, destacó sobre el momento actual del club.
Luego se refirió a las derrotas, sobre todo en Copa Sudamericana: “Llamativas son las forman en las que se perdieron todos los partidos. Después, con todo respeto, perder de la forma que perdiste con La Luz, cuando uno está acostumbrado a ganar así toda la vida. Se tuvo mucha tolerancia en mantener al entrenador y creer que podía cambiar. No supo hacerlo y, por ahí, los jugadores no dieron la talla”.
“La mayoría no son del club y no es fácil jugar en Peñarol. Parece todo lindo, pero el día que perdés te van a cobrar. Hay pocos que están acostumbrados a eso”, indicó sobre el plantel actual, y añadió: “Materia prima hay, porque son buenos jugadores, pero falta trabajo y convencimiento”.
Pablo Bengoechea y Gabriel Cedrés “son muy hinchas de Peñarol, yo creo que intentan y quieren lo mejor para el club, pero hace mucho tiempo que están y no han logrado nada importante, que es lo que quiere la gente. Hay que ser autocrítico”, apuntó sobre los dos integrantes de la dirección deportiva.
Aseguró que le genera “tristeza y bronca” ver a Peñarol, “por la forma en que se perdía y se encaraban los partidos, no se veía una respuesta futbolística ni entrega”. “El Mota [Walter Gargano], el Cebolla [Cristian Rodríguez] y el Lolo [Fabián Estoyanoff] son jugadores con una espalda grande para aguantar muchas cosas, pero el hincha a veces tiene poca memoria y a la primera ya te cae. Peñarol tiene que tener tres o cuatro experientes porque son los que te aguantan el vestuario”, dijo.
“No quiero un Peñarol lírico. Quiero un Peñarol que vuelva a tener corazón, meter y ganar los partidos a huevo, como estamos acostumbrados. Meter y correr después te hace jugar bien sin querer. Es la mística nuestra, no hay que imitar a los de la otra vereda. Nos queremos contagiar de algo que estamos muy lejos, hay que volver a las raíces, contratar jugadores de la casa, porque ahora juegan dos o tres partidos y ya se creen ídolos”, finalizó.