Werder Bremen vio trunca su escalada en la clasificación y seguirá una jornada más anclado en los puestos de descenso, tras caer este miércoles por 3-0 ante el Eintracht de Fráncfort.
El conjunto de Florian Kohfeldt, que parecía haber reaccionado en las últimas semanas tras encadenar dos victorias y un empate desde el reinicio de la competición, volvió a caer en los mismos errores que le han llevado a la parte baja de la tabla.
El equipo de Bremen lo intentó y a los 36 minutos reclamó un penal por manos en el interior del área del defensa argentino del Eintracht, David Abraham.
Pena máxima que el árbitro no concedió, pese a que en la imágenes se comprobó como el zaguero tocaba el balón con la mano, al comprobarse en el VAR que con anterioridad se había producido fuera de juego.
Un duro golpe para el Werder Bremen, que poco a poco perdiendo fuelle en la segunda mitad, lo que no desaprovechó el Eintracht para hacerse con los tres puntos en juego.
Nada pudo evitar que en el 61, el delantero portugués André Silva adelantase a los visitantes en el marcador (0-1) al rematar de cabeza un centro desde la izquierda de Kostic.
Ventaja que se encargó de doblar para el Eintracht, el centrocampista Stefan Ilsanker, que apenas unos segundos después de ingresar en el campo, firmó a los 81 el 0-2.
Un gol que pareció aplacar el hambre del exjugador del Leipzig, que estableció en el 90 el definitivo 0-3 al rematar de cabeza una falta botada por el neerlandés Jonatahan De Guzmán.