El ex futbolista Claudio Ibraim Vaz Leal, Branco, campeón con la selección brasileña en el Mundial de Estados Unidos 1994, fue trasladado a una unidad de cuidados intensivos (UCI), donde está intubado tras un agravamiento de su cuadro clínico por COVID-19.

El recordado lateral izquierdo de 56 años está ingresado en el Hospital CopaStar de Río de Janeiro desde el martes con un cuadro “grave” de infección pulmonar como consecuencia del nuevo coronavirus, de acuerdo con el último boletín médico divulgado este viernes.

El jueves sufrió un empeoramiento en su estado de salud y fue trasladado a una cama de terapia intensiva, donde se encuentra “sedado” y con “ventilación mecánica”. En las últimas 24 horas evolucionó de “forma estable”, aunque aún no hay una previsión sobre cuándo podrá respirar por sus propios medios, según indicó el equipo médico en la nota.

Según el portal 'GloboEsporte', Branco es uno de los seis infectados que recientemente viajaron con la selección brasileña sub-18 a la ciudad de Recife, en el nordeste del país, para una serie de entrenamientos y partidos amistosos.

Brasil pasa en estos momentos por la peor fase de la pandemia, debido, en parte, a la circulación de variantes del coronavirus más infecciosas, y hasta la fecha acumula casi 11,8 millones de casos y cerca de 290.000 decesos, según el Ministerio de Salud.

Branco, actual coordinador de las categorías inferiores de la selección brasileña, fue una de las piezas fundamentales del combinado que se proclamó campeón en el Mundial de Estados Unidos 1994, a los mandos del técnico Carlos Alberto Parreira y liderado en campo por el delantero Romario de Souza.

Cuatro años antes, en el Mundial de Italia, el lateral izquierdo protagonizó un momento controvertido en los octavos de final frente a Argentina, que pasó a la historia como el episodio del 'Agua Bendita'. La llave se decantó a favor del combinado albiceleste gracias a un tanto de Claudio Cannigia, pero no estuvo exenta de polémica.

Branco denunció en la época que sintió una serie de mareos tras beber de uno de los bidones de agua que le ofreció el fisioterapeuta argentino Miguel di Lorenzo y sugirió que podrían haberle echado alguna sustancia en el interior de la botella. La estrella del combinado albiceleste, el fallecido Diego Armando Maradona, llegó a bromear sobre ello, aunque el técnico Carlos Salvador Bilardo siempre lo negó.

EFE / FútbolUy