Bohemios anunció el cierre de sus puertas hasta nuevo aviso este miércoles, como consecuencia de “la situación económica del club derivada de los últimos años, agravada en los últimos meses, y en virtud de las medidas sanitarias adoptadas por el Poder Ejecutivo, debido al crecimiento de casos activos de COVID-19 que atraviesa Uruguay”.
El cierre se da “de manera transitoria” a partir de hoy, según explicó el presidente de la institución, Alejandro Flores, al programa ‘Básquetbol de Primera’ de Radio El Espectador. “Es un paso atrás para tomar impulso. Fue una decisión muy estudiada y tomada con la misma firmeza que cuando decidimos no participar de la Liga Uruguaya”, expresó.
“Veníamos mal antes de la pandemia y teníamos deudas por malas administraciones. Ahora el decreto de bajar el aforo al 30%, inhabilitar los vestuarios y cerrar la piscina fue un golpe de gracia”, señaló Flores, quien explicó que el club “venía perdiendo 50.000 dólares por mes” y que pedirá “un seguro de desempleo para los 103 funcionarios que trabajaron hasta hoy”.
“Íbamos en camino a ser un Neptuno más”, argumentó el máximo directivo de la entidad albimarrón, y sostuvo que la decisión se tomó en conjunto con la empresa con la que se firmó un fideicomiso que comenzará a regir desde febrero y por siete años con la posibilidad de ampliarlo por dos más. El Sinergia Group se hará cargo de las deudas y realizará obras para el usufructo buscando “que Bohemios vuelva a ser lo que era”.
“Nos pareció lo más sano cerrar el club provisoriamente. Cerramos el grifo de las pérdidas en forma responsable. Si no lo hacemos, le sumamos más deuda al inversor. La cantidad de gente que estaba yendo ahora era irrisoria; no más de 200 personas. Vamos a reestructurarnos como pasó con Biguá en 2002, que tuvo que cerrar y le llevó 12 años volver a ser lo que es hoy”, agregó.
El presidente contó que “la idea es volver a abrir a fines de febrero” y recordó que Bohemios “llegó a tener 6.000 socios y hoy no llega a 1.600”.