Desde este 25 de febrero, Boca Juniors tiene, de forma oficial, su Consulado en Uruguay, aunque la quijotada de dos hinchas comenzó hace tres años y fue sumando adeptos. El humilde anhelo de poder ver los partidos con otros xeneizes fue mutando hasta obtener el reconocimiento institucional y varios beneficios.

Ariel Sofía y Kevin Laguna, presidente y vice del Consulado, dieron el puntapié inicial averiguando los pasos a dar para emular lo hecho por las peñas provinciales. Comenzaron a reunir fanáticos y los transformaron en socios internacionales, lo que les da el derecho de concurrir a La Bombonera.

Dado el aforo del estadio y la cantidad de socios, es imposible entrar a un partido de Boca Juniors como local si no se está dentro del padrón. A través del Consulado, la gestión es rápida y con frecuencia viajan uruguayos (y argentinos residentes en Uruguay) cuyos corazones laten en azul y oro. Es la única forma de hacerlo desde este lado del Río de la Plata.

Además de la posibilidad de ingresar al templo xeneize y de juntarse a ver partidos, hay otros beneficios para los socios del Consulado y actividades que van desde ayuda a comedores infantiles y ollas populares hasta la creación de equipos de fútbol y básquet que compiten en distintas ligas amateurs.

Hubo viajes a Buenos Aires, acciones solidarias y hasta se creó un programa de radio, en sintonía con un  crecimiento sostenido desde enero de 2021. Por entonces, la idea de los precursores comenzó a tomar forma con el reconocimiento de “Consulado en formación” por parte del club, lo que generó un vínculo que terminó de hacerse oficial este sábado. El evento coincidió con el partido ante Vélez Sarsfield, que se vio en pantalla gigante y se celebró con bombos, platillos y cánticos.

Con la presencia de viejas glorias de Boca Juniors como Alberto Beto Márcico, Enrique Hrabina y el local Sergio Manteca Martínez, hubo festejo y reconocimiento. Los dirigentes Carlos Colombo, Martín Montero y Marcelo Núñez representaron al club para dar la bienvenida al Consulado de Uruguay, que apunta a seguir aumentando en masa y acciones.

Hoy son más de 200 los socios internacionales, pero el número aumenta si se consideran los que están en otras categorías como bebés, menores, adherentes, activos y vitalicios.

Ser socio internacional (requisito indispensable para entrar a un partido en La Bombonera) tiene un costo mensual de seis dólares, lo que otorga al asociado los beneficios que el resto de los socios tienen desde el primer día.

En el Consultado, además, hay socios colaboradores que contribuyen con una cuota anual de 2.500, monto que se destina al crecimiento de la organización para solventar acciones sociales, gastos administrativos y otros beneficios. Para ser parte, se envía una solicitud a través de este link.