Bayer Leverkusen le ganó al Werder Bremen 5-0 como local por la fecha 29 de la Bundesliga y, todavía con cinco encuentros por delante, se coronó campeón por llegar a 79 puntos, 16 más que Bayern Múnich y Stuttgart, sus más inmediatos perseguidores.
El equipo que hoy es dirigido por Xabi Alonso nunca había conquistado la liga alemana en sus 119 años de vida, por lo que el logro de hoy fue celebradísimo y a estadio lleno. Además, le sumó la condición de invicto con 25 victorias y cuatro empates.
El cuadro rojinegro abrió el tanteador a los 25’, cuando el nigeriano Victor Boniface capitalizó un penal sancionado a instancias del VAR por una infracción del argentino Julián Malatini sobre el extremo Jonas Hofmann dentro del área visitante.
A los 60’ aumentó la renta el suizo Granit Xhaka con un imponente zurdazo desde afuera del área, y ocho minutos después metió el tercero Florian Wirtz con un derechazo no menos espectacular, también desde lejos. El propio Florian hizo el cuatro a los 83’ y el quinto a los 90’ en medio de una emocionante invasión de público.
A esa altura la gente ya estaba al pie de campo, pronta para adueñarse del terreno de juego del Bay Arena de Leverkusen, que palpitaba un festejo largamente esperado por una hinchada que vio a su equipo ser subcampeón en 1997, 1999, 2000, 2002 y 2011.
Este título del equipo de Bayer cortó con una racha de 11 consecutivos del Bayern Múnich, ganador de la Bundesliga desde la temporada 2012/13 hasta la 2022/23. Antes hubo un bicampeonato del Borussia Dortmund en la 2010/11 y 2011/12.