La fijación del segundo partido de la serie semifinal de la Liga Uruguaya de básquetbol entre Aguada y Nacional está generando polémica y discrepancias de todo tipo entre dirigentes y autoridades, dado el brote de coronavirus que se dio en el plantel tricolor y la posición de la Federación Uruguaya de básquetbol (FUBB) de mantener la fecha del martes para la disputa del cotejo.

Desde la FUBB se emitió un comunicado anunciando que Nacional incumplió algunos aspectos fundamentales del protocolo de seguridad sanitaria que aprobaron los clubes, como el hecho de avisar de antemano que un jugador debía ser hisopado, y se recordó que antes de la reanudación de la Liga se les aclaró a todos que no habría postergaciones de partidos.

Ya en octubre el mensaje desde las autoridades de la FUBB y la Liga fue claro; los jugadores que no pudieran jugar no iban a estar disponibles, pero no serían argumento suficiente para postergar un encuentro más de 24 horas. Por tal motivo, si bien se postergó para el sábado el partido que estaba previsto para el pasado viernes, y después se pasó para el martes, en este caso no habrá una nueva reprogramación.

La FUBB mantuvo el horario del partido del martes. Nacional, con un total de 16 casos de COVID-19 sobre 26 análisis entre jugadores, dirigentes, funcionarios e integrantes del cuerpo técnico, debe definir si no se presentará o si jugará con Dominique Morrison, Charles Mitchell, Hatila Passos, Martín Larrea y ocho juveniles. En caso de no presentarse, el encuentro se le dará por ganado a Aguada (20-0) y la serie quedará 1-1.

Una de las voces que se alzó en las últimas horas fue la de Leandro García Morales, quien a través de su cuenta de Twitter fue muy claro en su postura respecto a la entidad tricolores. “Dirigentes, médicos, cuerpo técnico y jugadores de Nacional deberían pedir disculpas por ponernos a todos en riesgo. No estar al tanto de los protocolos y reglamentos no es excusa para nadie”, afirmó, recordando que el plantel albo entrenó en el Antel Arena previo a los partidos sin avisar a los demás clubes y sabiendo que tenía posibilidades de contagio.