Uruguay atraviesa una situación límite en la Copa del Mundo y las miradas apuntan a Ronald Araujo, quien sigue poniéndose a punto con un integrante del staff médico del Barcelona supervisando el período de rehabilitación de su lesión.
A dos meses de haber sido operado del tendón del aductor largo del muslo derecho, el uruguayo todavía no tiene el alta deportiva y debe limitarse a entrenar, aunque desde su club temen que en filas celestes quieran acelerar indebidamente su recuperación.
Medios catalanes que están empapados en el día a día culé como Mundo Deportivo y Sport, publican artículos casi a diario al respecto. En el último, se asegura que en filas blaugranas hay un descontento con el tratamiento que se le está dando al riverense.
Recuerdan que Barcelona accedió a que viajara a Catar con la condición de que no sumara minutos en la fase de grupos, y de que jugara únicamente si tenía la convicción de que hacerlo no genera ningún tipo de riesgo.
“Pero es que además, el Barça está molesto con la AUF desde poco después de la lesión porque supo que el día antes del partido en que cayó Araujo, el central realizó una doble sesión de trabajo. Algo totalmente impensable en el FC Barcelona, donde las previas de los partidos son suaves, reservando a los jugadores para el esfuerzo del día siguiente”, añade Mundo Deportivo sobre aquel amistoso del 23 de setiembre frente a Irán, cuando el riverense se sintió en el primer minuto.
“Desde entonces en el club azulgrana hay malestar por los métodos del staff técnico uruguayo. Además, saben que ahora se está ‘apretando’ a Araujo a un ritmo que no toca porque la cirugía aún no está del todo consolidada y, por tanto, hay riesgo de recaída. Todo ello con un preparador físico tan exigente como el ‘Profe’ Ortega en las filas de Uruguay”, añade.
Desde el Barcelona “confían en que el defensa imponga su sentido común” y se niegue a jugar. El mismo medio sostiene que se le permitió viajar con la condición de “valorar si podía ayudar” solo “en caso de llegar a la semana final del torneo”.