El equipo visitante se puso el traje de sometido incluso antes de que el local empezara a someterlo. Los andaluces se replegaron demasiado atrás y muy cerca de su propio arco, dejando únicamente a Bacca y Denis Suárez arriba esperando algún contragolpe. Así no sorprendió que los culés empezaran a generar situaciones de gol sobre el arco de Beto, quien ya a los 10' tuvo que salir a tapar un mano a mano con Suárez después de que el uruguayo recibiera un buen pase de Xavi pero no pudiera llegar a rematar por culpa del control largo que realizó.

Sevilla cometió demasiadas faltas cerca de su trinchera, y a los 21' lo pagó caro. Banega bajó a Messi y el crack rosarino la colgó del ángulo para cortar una racha de un mes y cuatro días sin marcar. Además, con ese notable tiro libre ya igualaba el record del legendario Telmo Zarra como máximo anotador histórico de la Liga de España.

Barcelona siguió controlando el trámite a partir de la posesión de la pelota, y su oponente casi no salía de su campo pese a estar en desventaja. Lo más parecido a una situación de gol para los dirigidos por Unai Emery se dio a los 26', cuando el francés Mathieu se vio forzado a realizar un cierre espectacular ante el colombiano Bacca, quien se iba expreso al gol. Antes y después, nada en la primera mitad.
Sobre el cierre del primer tiempo estuvo a punto de aumentar la diferencia el conjunto blaugrana, pero primero el argentino Nicolás Pareja lo impidió despejando en la línea un remate de Suárez, que se movió casi exclusivamente como número uno, y casi enseguida Beto se agigantó para contener un mano a mano con Neymar.

En el segundo tiempo pasó de todo. Primero las dudas en defensa y la incertidumbre que volvía a sobrevolar el Camp cuando empataba Sevilla con gol de Jordi Alba, que intentaba cerrar un servicio desde la izquierda a los 47'. Pero nada más dos minutos más tarde Neymar anotaba de cabeza tras un cobro de falta libre de Xavi. Con la ventaja a favor Barcelona empezó de nuevo a adueñarse del partido y despejó todas las dudas a los 65' cuando Rakitic marcó de cabeza tras un medido pase de Luis Suárez, que ganó en velocidad por el sector derecho.

Después quedaría tiempo para el show de Lionel Messi. El argentino tuvo su noche de gloria al convertir un nuevo gol a los 72', en combinación con Neymar y deslizándose prácticamente sobre la línea, y superar a Zarra como máximo goleador en la historia de la Liga. Pero no sería todo, ya que cinco minutos más tarde un nuevo remate de Messi pondría el quinto y definitivo tanto, el número 253 en su cuenta personal en el campeonato español.

Barcelona festejó entonces, no solo por el partido que mete definitivamente a la "pulga" en la leyenda, sino que también el volver a golear, con otro estilo, con otras formas, pero siendo contundente en su casa, ganando con absoluta autoridad.

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