Joan Laporta presidió al Barcelona entre 2003 y 2010, y puede colgarse una medalla que nadie le quitará; fue el que le dio la confianza a Pep Guardiola en 2008 cuando lo ascendió desde el filial a la dirección técnica de un primer equipo que después hizo historia.

Poco después tuvo que dejar la presidencia porque los estatutos le impedían encabezar un nuevo período, y su sucesor fue Sandro Rosell. En 2015 volvió a presentarse pero obtuvo un 33% de los votos contra el 54% de Josep María Bartomeu, quien aún permanece en el cargo.

Hoy, ya en plena campaña pensando en las elecciones de marzo de 2021, criticó a la actual junta directiva por la manera en que manejó la salida de Luis Suárez, dado que fue Ronald Koeman quien le informó que no lo tendrá en cuenta y a través de una charla telefónica.

“¿Le dijeron a Suárez que no contaban con él por teléfono? Me parece un acto de cobardía del presidente y una falta de respeto al jugador. Esta forma de actuar es impresentable y perjudica la imagen del club”, escribió en sus redes sociales.

Posteriormente mostró temor por le futuro de Lionel Messi, interpretando que la salida de Suárez puede ser un empujón para la marcha del argentino. “Me hace sospechar que quieren vender a Leo Messi, lo que sería un error histórico. Pobre FC Barcelona en manos de estos incompetentes”, concluyó.