El 16 de julio no es un día más para la historia del fútbol uruguayo. Se cumplen 70 años de una de las epopeyas más grandes en la historia de este deporte a nivel mundial: Uruguay se proclamó campeón del mundo venciendo a Brasil en el Maracaná por 2-1 en 1950.
La "Celeste" se quedó con su segundo título mundial organizado por FIFA. Lo hizo en un escenario donde había alrededor de 180.000 personas hinchando por el local, Brasil. La tuvo que remar porque Albino Friaça Cardoso abrió el marcador.
Uruguay lo remontó con goles de Juan Alberto Schiaffino y Alcides Ghiggia y está gesta histórica recibió un nombre que hasta el día de hoy se sigue recordando: el Maracanazo.
Es un momento, un hito que ha marcado a todo el deporte del Uruguay. Tal es así que las autoridades de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) y la Secretaria Nacional de Deportes (SND) acudieron al panteón de los campeones del mundo del Mundial de 1950.
Entre los más destacados estuvieron presentes Ignacio Alonso, el presidente de la AUF, y Sebastián Bauzá, secretario de la SND, para homenajear a estos jugadores que quedaron, sin dudas, en la historia grande del fútbol uruguayo, mundial y todo el deporte.