Justin Gatlin llegaba a la final del Mundial de Atletismo de Beijing como favorito, ya que ostenta el mejor registro en lo que va del año (9.75). No obstante, otra vez en una definición volvió a hacerse enorme la figura de Usain Bolt.
El jamaiquino de 29 años dejó segundo por una centésima al estadounidense de 33 al imponerse con un tiempo de 9.79, una marca que está lejos de su récord de 9.58 pero que le alcanzó para adjudicarse su tercer Mundial en emotiva definición.
Bolt, campeón de los 100 y 200 metros llanos en las últimas dos citas olímpicas, ya había sido campeón en 2009 y 2013, y su único fracaso data del Mundial de Daegu en 2011, cuando una salida en falso lo dejó eliminado.
El bronce fue para el canadiense Andre de Grasse, quien llegó lejos de Bolt y Gatlin con un tiempo de 9.92.