Boca Juniors derrotó 8-7 por penales a Talleres de Córdoba en el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza y avanzó a cuartos de final de la Copa Argentina, en una extensa tanda en la que se patearon 22 tiros y hubo siete errados, y en un partido en el que el uruguayo Alexander Medina retornó a la dirección técnica del Matador.

A los 16 minutos de juego, Brian Aguirre el marcador para el Xeneize con un polémico gol en el que el propio atacante tomó la pelota cuando esta ya estaba afuera, pero la situación no fue advertida por el árbitro principal ni por sus compañeros.

El delantero presionó alto y le robó la pelota al defensor Kevin Mantilla, que buscó aguantar el balón hasta que este saliera. Sin embargo, si bien el jugador de Talleres logró su intención, los encargados de impartir justicia indicaron que la jugada debía continuar, y se cerró con el gol de Boca, situación que todos los jugadores del elenco cordobés le reclamaron al juez.