Plaza Colonia venció a Wanderers 2-0 a domicilio por la penúltima fecha del Torneo Apertura y se coronó campeón anticipado al sacar cuatro puntos de ventaja sobre Nacional, repitiendo así el histórico logro del Clausura 2016, cuando también bajo el mando de Eduardo Espinel alcanzó la gloria por primera vez.
Ni los locales ni los visitantes se apartaron de sus habituales repertorios. Los bohemios tuvieron más la pelota e intentaron posicionarse en campo rival desde el inicio, mientras que los patablancas se replegaron unos metros para salir de contragolpe y se mostraron más peligrosos con un gran aprovechamiento de la velocidad de Nicolás Dibble, la gran figura.
Los locales tuvieron apenas una llegada con remate franco en el primer tiempo y fue a los 15’, cuando tras un tiro libre que dio en la barrera apareció Rodrigo Rivero conectando un zurdazo que Santiago Mele contuvo en dos tiempos. Luego, sólo buenas intenciones y aproximaciones sin disparos de los dirigidos por Daniel Carreño en el primer tiempo.
El equipo de Eduardo Espinel fue más práctico y a los 17’ tuvo dos; un centro de Leonai Souza desde la izquierda que estuvo a punto de meterse y luego un derechazo de Dibble desde el borde del área que dio en el travesaño. A los 28’ volvió a llegar Leonai por la zurda y tiró un centro que terminó en cabezazo de Emilio Zeballos y atajada de Ignacio de Arruabarrena.
Tuvo su revancha Plaza Colonia a los 38’, cuando selló el 0-1 al descanso. Gonzalo Camargo ejecutó un tiro libre en forma de centro, Nicolás Olivera ganó de arriba, Álvaro Fernández llegó a la segunda pelota antes que De Arruabarrena y su toque al medio se transformó en asistencia para el cabezazo goleador de Zeballos en el área chica.
El tanto llevó a los patablancas a replegarse para el segundo tiempo y obligó a Wanderers, que llegó a este encuentro con apenas tres puntos ganados en los 15 anteriores disputados. Con su habitual juego de tenencia siguió machacando el elenco de Daniel Carreño, que a los 67’ acarició el 1-1 en una jugada clave que gracias a Santiago Mele no fue autogol de Mario Risso.
En esa incidencia hubo una mano del defensor visitante Nicolás Olivera en su propia área que no observaron el árbitro Gustavo Tejera ni el asistente Andrés Nievas, quien tenía la jugada de frente. Araújo reclamó el penal con razón e insistencia, pero se ganó su segunda tarjeta amarilla y dejó al equipo del Prado con 10 hombres. Con esa expulsión se liquidó el encuentro.
Wanderers siguió yendo al frente y Plaza Colonia encontró espacios para contragolpear. Dibble tuvo un remate en el caño tras hacer un desparramo a los 75’, y dos minutos después puso el 0-2. Después de una falta no advertida sobre Renzo López, el 11 picó desde su campo tras un pase profundo de Leonai Souza, eludió a De Arruabarrena y mandó la pelota a la red.
Todo lo demás, sobró. El equipo coloniense supo defenderse con su implacable línea de cinco defensores, mantuvo el cero en el arco por octava ocasión en 14 partidos y logró una cifra histórica para un equipo chico en el fútbol uruguayo; 22 puntos ganados sobre 24 disputados en condición de visitante en un torneo corto.