Pese a jugar con mayoría de suplentes en una cancha que dificultó el trabajo de los dos equipos, Peñarol le ganó a Progreso y sigue a dos puntos de Nacional de cara a la última fecha, en la que recibirá a Defensor Sporting en simultáneo al cotejo de los tricolores ante Danubio.
La cantidad de agua empozada en el piso del Nasazzi conspiró contra los dos equipos desde el primer minuto, por lo que fue una constante los envíos en largo. Y más aún después de que un intento de salir jugando en corto le costara un gol a Progreso. El arquero Techera sacó mal, Marcel Novick robó el balón y asistió a Fidel Martínez, que definió de zurda a la red a los 13’.
Luego hubo mucha más fricción, amonestaciones y cambios por lesión que jugadas de riesgo. Leonardo Ramos se vio obligado a mandar a la cancha a los juveniles Brian Rodríguez y Enzo Martínez por Giovanni González y Fabricio Formiliano, que se retiraron sentidos. Era un poco más el cuadro mirasol, pero le faltaba el último pase para definir.
A los 43’ se quedaron con 10 hombres los gauchos por la segunda tarjeta amarilla de Makuka, que fue con el codo arriba a disputar un balón aéreo con Franco Martínez. Pese a ello, cinco minutos más tarde se dio la única llegada de Progreso en la primera mitad; Lemmo buscó a Colmán en el área, éste pivoteó y Gottesman remató forzando una gran atajada de Dawson.
De inmediato, en la última jugada del primer tiempo, Palacios apareció por detrás de todos en una acción a balón parado y remató de zurda. El esférico atravesó el área chica y no entraba al arco local, pero casi lo mete en contra Loffreda en su intento por despejar. Techera lo atajó y con esa incidencia se terminó la etapa inicial.
En la complementaria el partido fue aún peor, con Peñarol algo más replegado y Progreso sin mostrar argumentos para igualar. La superioridad numérica de los carboneros no se evidenció en ningún momento, ni en lo físico ni en lo futbolístico, por lo que pasaron zozobra en su intento por mantener el resultado en un partido tan complicado como la cancha.
Alexander Rosso falló un derechazo cruzado en posición inmejorable a los 66’, y Dawson le tapó un mano a mano a Ignacio Lemmo a los 80’ en una jugada que empezó en un muy mal saque del propio arquero. Luego un tiro libre de Gottesman muy cerca del área pasó a centímetros del travesaño.
Peñarol tuvo un contragolpe que Fidel Martínez no pudo finalizar por culpa de un gran cierre de Loffreda luego de eludir a Techera. Ya sobre el final y con su rival volcado al ataque se dio una enorme jugada de Corujo apilando hombres por derecha que definió trabado por un rival, y una pared entre Franco Martínez y Palacios que llegó a posición de peligro pero sin remate. Lo último fue un bombazo de Rodrigo Piñeiro que reventó el travesaño a los 94’.
Sin brillar, malogrando ocasiones al final y haciendo lo que tenía que hacer por la tabla, el elenco de Leonardo Ramos abrochó tres puntos fundamentales y se mantiene en la pelea a la espera de un traspié de Nacional en Jardines del Hipódromo el próximo sábado.