Apertura: Peñarol derrotó a Racing 2-0 con goles de Fidel Martínez y Lucas Hernández

Peñarol fue de menos a más en su debut por el Apertura 2018 y terminó redondeando una victoria mucho más cómoda que lo que refleja el score. Empezó mal, liquidó el pleito rápido y después dosificó energías aprovechando la ventaja numérica.

Los carboneros no tuvieron un buen inicio de partido y hasta pudieron quedar en desventaja a los 12’, cuando Franco Romero llegó a fondo por derecha ante la pasividad de Lucas Hernández y dejó el gol servido en bandeja a Nicolás Sosa. Sin embargo, el atacante elevó su derechazo en posición inmejorable para convertir.

Peñarol no encontraba su mejor juego, hasta que a los 30’ abrió el score y encaminó el trámite. Cristian Rodríguez conectó con Maxi Rodríguez por el medio, el argentino habilitó a Fidel Martínez y el ecuatoriano ganó en velocidad y definió a la red con el botín zurdo ante la salida del arquero Torresagasti.

Apenas un minuto y medio después terminó de complicársele el panorama a Racing. Ignacio Nicolini, de correcto comienzo de partido en la administración de la pelota, le entró muy duro a Agustín Canobbio y vio la tarjeta roja directa, bien exhibida por el árbitro Pablo Giménez.

El conjunto de Leonardo Ramos se sintió más cómodo, malogró ocasiones claras en los pies del Cebolla Rodríguez y Fidel Martínez, y anotó un golazo lícito gracias al veloz atacante ecuatoriano que fue mal invalidado por un inexistente offside.

Racing, que dejó pasar su momento en el partido, generó una aproximación a partir de un pase de Mauro Estol que no aprovechó Maicol Cabrera por demorar la definición a los 39’, y cinco minutos después avisó con un zurdazo a distancia apenas ancho de Michel Araújo.

Peñarol no quiso complicarse y liquidó el pleito a los 51’ mediante un espectacular zurdazo de Lucas Hernández a distancia. El buen lateral mirasol se tuvo confianza y remató en carrera para convertir el que probablemente sea el mejor tanto de la fecha.

Luego los dos entrenadores hicieron variantes, pero nada cambió. El cuadro de Rodrigo López no mostró armas para descontar y el de Leonardo Ramos dosificó energías y terminó ganando a media máquina.