El partido comenzó con Peñarol tratando de sacar rápidas ventajas ante su rival para manejar el trámite con tranquilidad y vaya si lo logró.

A los dos minutos un tiro libre a pedir de boca para Cristian Lema no fue desaprovechado por el argentino que con gran remate que dio en el travesaño y pico dentro hizo festejar a los hinchas mirasoles.

Después de eso el partido se pinchó, se comenzó a hacer mucho más peleado en zona de volantes y fueron los de Giordano los que sacaron mejor provecho de ello, logrando tener alguna llegada de peligro sobre el arco rival.

Una corrida de Urruti a los 24' por derecha terminó en un buen pase a Claudio Herrera en el área, pero su definición no fue precisa y con un toque de Dawson se perdió afuera.

Los de López en tanto volcaban su generación por la banda derecha donde Giovanni González y Agustín Canobbio apostaban a generar desequilibrio, una yunta que a los 38' dio su rédito.

Tras combinar entre ambos, Gio puso un centro preciso para la entrada por el centro de Gabriel Fernández que con el arco a disposición para marcar el 2-0 que amplió diferencias. 

Poco más pasó de allí al cierre de la primera etapa donde Peñarol se fue con una buena renta, sin exigirse demasiado y aprovechando las chances que creó.

Controlado

En el complemento River salió dispuesto a arriesgar más y en los primeros compases un desborde a pura velocidad de Da Luz que se la dio al ingresado Leyes, terminó en un remate franco que Dawson voló para tapar.

Recién sobre los 55' los mirasoles lograron ofender a su rival primero con un remate de Acevedo que se fue cerca y más tarde con otro intento de Lores de media distancia, pero sin potencia.

De allí en adelante el partido se hizo aburrido, tedioso, con un darsenero impotente que no encontraba los caminos para complicar la zaga rival y los carboneros regulando, manejando los tiempos y pensando en Flamengo primero y Nacional después, sus próximos desafíos.

Incluso López pudo darle varios minutos de fútbol a Walter Gargano, pieza fundamental del equipo para esos cotejos claves, mientras dejaba correr los minutos hacia una victoria relajada.

El pitazo de Daniel Fedorczuk puso un manto de piedad para los espectadores, cerrando la faena con el objetivo cumplido para Peñarol, ganó 2-0, se mantiene como líder del Apertura y sin gran desgaste físico, previo a encarar dos juegos que pueden marcar el semestre.