El partido comenzó con dos equipos que intentaron afianzar líneas en cancha, para poder ofender de forma combinada y sin desordenarse, tratando de presionar la salida del rival.
Los tricolores trataron de complicar con velocidad, principalmente buscando a Barcia que siempre encaró, mientras que la visita tenía en Carlos Núñez una carta de desequilibrio que pareció molestar a la última zona rival.
Un par de intentonas de Sebastián Fernández antes de los primeros 20' mostraron a los albos en acción, pero no encontraban los caminos para quebrar la defensa negriazul que lentamente le fue transfiriendo la responsabilidad a los de Medina.
Un par de pelotas puestas por Barcia, la primera que De Pena desperdició con un remate sin dirección y luego un balón parado que cabeceó Bergessio y Bava despejó tras gran vuelo, mostraron como Nacional quebraba la línea por derecha.
Lo tuvo la visita
El complemento se inició con la más clara de los de Pezzolano hasta ese momento, cuando Federico Martínez encaró por izquierda y su centro rebotado, encontró a Souza lanzado pero su remate se fue muy alto.
Los de Belvedere habían crecido en el campo y Nacional comenzó a perder pie en la marca de la mitad de la cancha, lo que generó una nueva acción ofensiva de los visitantes que Mejía tapó por dos, primero a Souza y luego a Núñez para mantener el cero en su arco.
Y Liverpool complicaba por derecha donde un centro de Gabrielli encontró a Núñez qie desvió y otra vez el panameño apareció en acción para salvar.
Viudez y Sebastián Rodríguez fueron las apuestas de Medina para mejorar en la creación en búsqueda de brechas que pudieran acercar a la valla rival, algo que en esos segundos 45' les fue esquivo.
Y fue el propio Viudez que encarando hizo que Martín Rivas viera la segunda tarjeta amarilla y con ello la roja dejando con diez a los de Pezzolano a los 84'.
Sobre el cierre Juan Ignacio Ramírez (ingresado) con dos remates claros se lo perdió, mientras que Souza en otra acción ofensiva vio la roja por doble amarilla luego de simular en el área un penal que no existió.
Los de Belvedere cerraron la adición con dos menos y las mejores chances de ganar el partido, ante un Nacional que nunca encontró la fórmula del gol y cerró un empate sin goles (0-0), que por lo visto en el complemento pudo haber costado hasta los tres puntos.