Liverpool sumó su cuarta victoria consecutiva y sigue creciendo en la tabla. Tras un inicio en el que mostró más dudas que certezas, llegó a 17 unidades y está a cinco del líder Peñarol.
El partido arrancó mejor de lo que podía imaginar hasta el más fanático hincha negriazul. Los dirigidos por Paulo Pezzolano tenían dos tantos de ventaja antes de cumplirse el cuarto minuto de juego, lo que marcó el resto del trámite.
Casi a los 90 segundos abrió el score Juan Ignacio Ramírez luego de bajar un balón de cabeza para Diego Guastavino y recibir la devolución que lo dejó de cara al gol. El Colo definió entre las piernas del arquero Rodrigo Odriozola.
Un par de minutos más tarde cayó el 0-2 desde un saque de banda. Hernán Figueredo recibió el balón y tiró un centro al área, Ramírez pivoteó y Federico Martínez definió con un buen derechazo entrando al área para sorpresa del público local.
Rampla Juniors, herido por los goles, salió obligado a buscar el descuento y acumuló méritos antes de lograrlo. Avisó Jhony Galli con un remate apenas desviado y luego se lució Jorge Bava mandando al córner un remate de Matías Soto.
De un centro de Ignacio Panzariello desde el sector derecho llegó el descuento a los 24’ por obra de Diego Martiñones, que conectó un gran cabezazo con el parietal izquierdo y mandó la pelota a la red por arriba de Bava.
Luego fue Liverpool el que estuvo más cerca del gol antes del descanso. Primero Soto llegó justo para cerrar un disparo de Ramírez tras contragolpe conducido por Federico Martínez y después se agigantó Odriozola para tapar un cabezazo de Sebastián Píriz.
En el complemento se replegó el equipo de Pezzolano y se fue con todo arriba el del Ronco López, que impulsado por los ingresos de Julián Lalinde y el brasileño Igor Paim por Matías Cócaro y Wilinton Techera asumió riesgos y atacó buscando el empate.
Más tarde entró el delantero Matías Rigoleto por el defensor Soto en filas rojiverdes. La búsqueda fue constante pero con más ganas que fútbol, por lo que a Liverpool le alcanzó con ser firme en el juego aéreo para llevarse los puntos tras malograr varias situaciones de contragolpe.