Defensor Sporting trepó al menos por un rato a la cima del Apertura y sigue dependiendo de sí para ser campeón. Sufriendo y sin merecerlo, sacó adelante un difícil partido ante Wanderers en el Viera y ya piensa en la final anticipada del próximo domingo ante Nacional en el Franzini.
El partido empezó de manera soñada para los violetas, que a los 4’ ya estaban en ventaja. Desbordó Gonzalo Bueno por izquierda y su centro rasante fue conectado en el segundo palo por Matías Zunino, cuyo zurdazo venció la resistencia de Martín Rodríguez.
Luego Wanderers asumió la iniciativa y mereció el 1-1. Palacios avisó con un tiro libre apenas desviado a los 8’, y sobre los 30’ malogró un mano a mano definiendo por arriba. Un minuto antes Mauricio Gómez estrelló un tiro libre en el travesaño del arco visitante.
El arquero violeta Guillermo Reyes mandó al córner un cabezazo de Nacho González que pedía red a los 44’, y de ese tiro de esquina nació el 0-2. Defensor salió rápido de contragolpe, Zunino habilitó en profundidad a Bueno y el Zorrito definió a la red tras un pique demoledor.
El elenco de Eduardo Acevedo se fue al descanso con dos goles de ventaja y un jugador menos. Sobre el epílogo de la primera etapa Guillermo de los Santos vio su segunda amonestación por tirar desde afuera de la cancha hacia adentro una pelota con el juego en marcha.
El zaguero violeta estaba afuera tras recibir un codazo de Nacho González que, si bien debió valerle la expulsión, no le costó ni amarilla. La incidencia generó protestas y un tumulto en el que terminó viendo la roja el defensor Martín Rivas, suplente en el elenco bohemio.
Los del Parque Rodó pasaron a jugar con cuatro en el fondo, dado el retroceso de los carrileros Zunino y Suárez. Wanderers salió con todo al segundo tiempo, aprovechó la superioridad numérica para volcar la cancha a su favor y sacudió a Reyes en más de una oportunidad.
Defensor encontró espacios para contragolpear y casi liquida el pleito a los 61’, cuando Rabuñal le robó el balón a Blanco en campo rival y su desborde por izquierda terminó en un zurdazo de Boselli al travesaño. Boselli había sustituido al lesionado Cardacio en la primera etapa y fue reemplazado en la segunda por Maulela, cuando su equipo pasaba mal.
Es que Wanderers descontó a los 66’ por un penal de Sergio Blanco fabricado por Palacios y bien pitado por el árbitro tras falta de Zunino. Tras ese gol los bohemios siguieron buscando el empate y dejando espacios atrás, y los violetas se replegaron procurando salir rápido.
Maxi Gómez, que jugó disminuido físicamente tras una semana entre algodones, malogró una oportunidad clara a los 71’. Su equipo pudo haber pagado caro la falta de eficacia en las pocas pero peligrosísimas jugadas que desperdició, y casi hipoteca sus chances de título en el final.
Wanderers nunca bajó los brazos y a los 89’ tuvo su premio. Tras un córner y un par de rebotes, apareció Emiliano Díaz solo en el borde del área chica para mandar la pelota a la red y marcar un gol que más que en el Prado fue festejado en el Parque Central.
Parecía bajarse de la lucha Defensor, pero apareció Gómez en el final. El 9 generó un penal increíble de Colombino al recoger un rebote en el área y facturó la pena máxima. En el festejo fue expulsado Nicolás Correa por festejar de cara a la hinchada local y no jugará ante Nacional.