Apertura: Danubio y Liverpool fueron de más a menos e igualaron 1-1 en Jardines

Danubio y Liverpool igualaron 1-1 por la primera fecha del torneo Apertura, en un duelo donde las emociones estuvieron en el primer tiempo y se cerró con reparto de unidades.

El partido tuvo un inicio de paridad, con dos equipos apostando a afianzar líneas y ser ordenados para luego tratar de avanzar en forma colectiva y por las bandas.

Y en las dos primeras llegadas a fondo se concretaron los goles que quebraron la paridad, uno para cada lado. A los 7' Ignacio Pintos metió una hermosa pelota a espaldas de Cayetano que Lucas Sanseviero recepcionó, encaró y definió con calidad ante la salida desesperada de Lentinelly para el 1-0.

Pero tres minutos después todo quedó en tablas. Una acción por derecha terminó en un gran centro de Facundo Perdomo que encontró sólo a Abel Hernández para de palomita conectar de cabeza y sentenciar el 1-1.

De alli en adelante el duelo cayó en un pozo, ya con los ofensivos perdiendo la batalla ante las defensas y con una pelea en el mediocampo que fue prevaleciendo.

Sergio Núñez y Sebastián Fernández casi no entraban en juego, mientras que Facundo Núñez era muy intermitente en los visitantes.

Pasados los 30' apareció una gran acción individual de Kevin Amaro, un jugador que muchas veces se deja caer, pero que en esta ocasión logró colocar un caño sobre Rabino, para encarar y sacar un tiro cruzado que logró despejar Goicoechea.

La respuesta fue ya casi con el tiempo cumplido, otra vez con Sanseviero a espaldas de Cayetano, recibiendo un pase de Papelito y probando cruzado pero muy ancho. 1-1 y al descanso.

Muy poquito

El complemento comenzó de una tónica similar a lo anterior, parejo, de poca profundidad y la espera de alguna individualidad o toque de claridad para generar peligro.

Sanseviero, una vez más, logró ponerse en posición de disparo, aunque su remate no encontró arco en un aviso, mientras que en los negriazules la apuesta era el uno por uno de Amaro, que cuando ganaba, no lograba dar el pase final de forma acertada.

Esto hizo que los entrenadores empezaran a mover los bancos, buscando soluciones y además refrescar los once en una tarde muy calurosa.

Pero de allí al cierre sucedió muy poca acción en las áreas, con centros forzados que sacaban los zagueros, faltas tácticas para no dar espacios en ataque y goleros que tuvieron escaso trabajo.

El pitazo del árbitro terminó sentenciando el justificado 1-1 que terminó otorgando un punto por lado en el arranque de una nueva temporada del balompié uruguayo.