Danubio salvó su invicto en Jardines del Hipódromo y logró un triunfazo de arremetida para trepar al cuarto lugar de la tabla de posiciones con 18 puntos. Tras irse en desventaja al entretiempo, reaccionó en la segunda mitad y celebró una merecida victoria.
Los pedrenses sorprendieron en el arranque y antes de los 20 minutos ya ganaban 2-0. Diego García abrió el score a los 11’ tras conducir varios metros y definir cruzado ante la salida de Federico Cristóforo, y a los 19’ asistió a Joaquín Zeballos para el 0-2 después de aprovechar un error de los franjeados en la salida.
Danubio descontó a los 31’ gracias al defensor Ernesto Goñi, que convirtió poniéndole el taco a un buscapié de Leandro Sosa luego de un tiro de esquina, y cuando parecía que el local estaba para el 2-2 cayó el 1-3 a los 39’, cuando apareció Federico Viñas en el área local capitalizando un rebote.
Un penal dudoso le permitió a Carlos Grossmuller descontar a los 45’ y le dio un envión al cuadro de Marcelo Méndez, que por la misma vía perdonó el 3-3 a los 52’. Luego de una falta sobre Goñi, Grossmuller asumió la pena máxima y Sebastián Britos tapó el remate. En el rebote volvió a agigantarse el arquero frente a Maravilla.
No obstante, el 3-3 estaba al caer y cayó a los 66’ como un justo premio ante tanta insistencia. El joven Santiago Paiva encontró el balón merodeando el área y con un latigazo al primer palo igualó el tanteador con el que fue su primer tanto en Primera División.
Por si fuera poco, el propio Paiva fue el responsable de hacer explotar las gargantas de los estoicos hinchas danubianos que se hicieron presentes en la lluviosa tarde de Jardines del Hipódromo. El joven atacante peinó un centro anticipando la salida de Britos y selló el 4-3 a los 88’.