Agustín Álvarez Martínez aceptó la oferta para jugar durante la presente temporada en el Elche, equipo de la Segunda División de España, porque suponía una “gran oportunidad” para volver a disfrutar del fútbol tras la grave lesión de rodilla que sufrió en el Sassuolo, club italiano del que llegó cedido a mediados de año.
En una entrevista concedida a los medios del club, el delantero uruguayo de 23 años repasó su trayectoria deportiva y explicado sus inicios futbolísticos en Peñarol, club del que es hincha y al que aspira a regresar en el futuro.
“Desde chico fui de Peñarol y mi sueño era jugar en Primera”, recordó el ariete, quien indicó que, siendo juvenil, el primer técnico que lo llamó para entrenar con el primer equipo fue Diego Forlán, aunque debutó con Mario Saralegui.
“Luego, tras el año del covid, pasé a debutar con el primer equipo, a marcar mi primer gol y a ser una pieza clave del equipo. Llegó la llamada de la selección y mi debut con gol”, repasó el atacante, que admite que “todo sucedió muy rápido”.
“Me siento muy agradecido a la gente de Peñarol. Algo hice bien cuando la gente me sigue y anima tanto desde allí”, valoró. “Mi idea es regresar a Peñarol. Me gustaría jugar unos años más acá en Europa y luego volver”, apuntó.
Lo que pasó y lo que se viene
El Canario aseguró que la lesión de rodilla, tras llegar a Italia, fue un “golpe duro que no esperaba”, aunque precisó que se tomó esta etapa de convalecencia como “un aprendizaje”. En cuanto a sus referentes futbolísticos, el jugador señaló a sus compatriotas Diego Forlán, Edinson Cavani y Luis Suárez.
“Siempre quise ser como ellos y seguir sus pasos, aunque es imposible”, comentó el jugador del Elche, quien admitió una debilidad especial por el exdelantero del Barcelona. “Compartí momentos con él en la selección y fue maravilloso. Cuando me lesioné, siempre me aconsejó y eso significó mucho para mí”, desveló.
Álvarez afirmó que no sintió una presión especial por ser el jugador del fútbol uruguayo por el que más dinero se pagó (12 millones de euros). “Nunca he mirado si era mucho o poco”, dijo el delantero, que lamentó que la lesión se produjera cuando ya se estaba adaptando al juego de Italia y a su nuevo club.
El atacante definió el fútbol uruguayo como “más aguerrido”, valoró del italiano su componente “táctico y físico” y calificó el español como “más técnico y con más espacios”. “El español se adapta más a mis características”, explicó el jugador, quien considera una anécdota que, a pesar de su estatura, sus tres goles en Liga hayan sido con la cabeza y lejos de Elche.
Su primer gol, ante el Málaga, y el debut en el Martínez Valero son los momentos más especiales, de momento, que ha vivido desde su llegada a Elche. Además, elogió del fútbol español “la calidad de los estadios” si bien aseguró que el “más bonito” es el Martínez Valero.
“No miro retos personales, sino grupales. Mi reto es ayudar a que el Elche pueda estar lo más arriba posible y que pueda ascender, que es lo que se merece el club”, quien no descartó “hablar con el Sassuolo” para quedarse si el equipo ilicitano alcanza la Primera División.
En base a EFE