Lionel Messi aseguró tras clasificarse a la semifinal de la Copa América que pese a fallar su penal en la tanda contra Ecuador, estaba convencido de que “el Dibu [Emiliano Martínez] por lo menos iba a agarrar uno”.

“Siempre da tranquilidad tenerlo a él en estos momentos. Tiene mucha confianza, mucha fe de que iba a agarrar uno. Le gusta, lo disfruta, lo vive. Si bien estaba con bronca por haber errado, con el Dibu estamos tranquilos. Se agranda en estos momentos”, dijo en la zona mixta del NRG Stadium de Houston.

Con respecto a la decisión de picar su penal, explicó: “Bronca porque iba convencido de patearlo así, había hablado con Dibu, con [Gerónimo] Rulli. Venía pateando varios seguidos cruzados, el arquero de hecho se tira cruzado. La quise tocar y se me fue”.

El capitán, que reapareció tras no jugar el partido contra Perú, afirmó que se sintió bien: “Estoy bien. No sentí molestias, pero sí miedo psicológico”, afirmó el 10, que se volvió a quejar del estado de los terrenos de juego: “Es una realidad que las canchas no son buenas”.

Pero dio valor al partido planteado por Ecuador: “Sabíamos que el partido iba a ser de esta manera, que iba a ser un rival muy difícil. Ecuador es un rival intenso y la cancha tampoco ayudaba para jugar mucho, pero lo importante es que pasamos”, agregó.