Julio Ribas concedió una extensa nota telefónica al programa Locos por el Fútbol, de FM Del Sol, donde recordó anécdotas de sus pasajes por los clubes uruguayos a los que dirigió. Además habló de su presente en Gibraltar, un país que se ubica en el puesto 196 del ranking FIFA sobre un total de 210 selecciones afiliadas. Entre las de la UEFA está 54.º, sólo por encima de San Marino.
“No fue en primera instancia por el dinero o por ser un país con un gran nivel de vida que vine a Gibraltar. Vine porque había un desafío que era como ser campeón con Peñarol, Nacional, Bella Vista o Liverpool. El desafío era sacarlo del último lugar del ranking UEFA y del ranking FIFA. No había ganado ni empatado una sola vez en 30 o 40 partidos oficiales”, recordó.
“Acepté porque era un desafío que, para los de afuera, era imposible. Yo tenía la convicción de que íbamos a poder hacer algo histórico, y lo histórico era ganar y salir del último lugar del ranking. El día que lo logramos festejé como cualquiera de los 18 campeonatos que los jugadores me hicieron ganar en los clubes”, confesó.
A la hora de hablar de desafíos, no descartó dirigir a Nacional si lo llaman. “Yo voy a donde me quieran. Si me llaman es porque me quieren, y si me quieren voy a Peñarol, a Nacional o a donde sea”, sostuvo al ser consultado por un hipotético llamado de José Decurnex. “Al único lugar que no voy es donde no me quieren. No estoy acostumbrado a meterme en un lugar donde no me quieren”, justificó.
“Después de ser campeón de la B con Bella Vista en 1976 pasé a Nacional, donde jugué en 1977, 1978 y 1979, y lo defendí a muerte. Y cuando fui a Peñarol, luché por Peñarol y lo defendí a muerte”, indicó el riverense de 63 años, quien reveló que a lo largo de su carrera se ha “movido por pasión por el trabajo y por las oportunidades”.
“Muchas veces dejé de lado la plata por ir a lugares donde podía realizar un muy buen trabajó. Cuando fui a Bella Vista en 1997 estaba en la B y no fui por lo económico, sino porque vi una oportunidad muy grande. Después de Peñarol me fue a buscar un equipo grande de Argentina y yo me fui a Liverpool, donde tenía la garantía de hacer un trabajo que me encantaba”, agregó.