Una vez finalizado el partido que clasificó al PSG a semifinales de la Champions League pese a perder 1-0 a manos del Bayern Múnich como local, Neymar dijo estar cómodo en su actual equipo, lo que refuerza la idea de que se quedará después de varios mercados de pases en los que se manejó su salida.
Respecto a ese posible pase con el que siempre se especuló y que no se ha concretado, aseguró que “ya no es un asunto”. “Es obvio que me siento a gusto y me siento en casa aquí en el PSG. Estoy más feliz que antes”, sostuvo el delantero brasileño de 29 años en diálogo con la cadena de su país TNT Sports.
Si bien en las últimas semanas hubo rumores que lo han vuelto a vincular con el Barcelona, club desde el que llegó al PSG en agosto de 2017 a cambio de 222 millones de euros, el jugador volvió a dar señales sobre una posible renovación de contrato, algo que era impensado hace un par de años cuando manifestaba su deseo de cambiar de aires.
Neymar alcanzó las semifinales por segundo año consecutivo con el PSG y en la zona mixta le preguntaron por su festejo efusivo junto a su compañero argentino Leandro Paredes, quien soltó un “la puta madre” de desahogo justo cuando pasaba por el lugar Joshua Kimmich, volante del Bayern Múnich que había asegurado que su equipo daría vuelta la serie.
“No fui a festajar ni a provocar. Festejé solo con Leo. Lo vi a Leo de frente y, por el destino, me crucé con él (Kimmich). Fue él quien dijo que eran mejores y que iban a clasificar. Pero es como he dicho; podés tener posesión de la pelota, podés cantarle a la mujer toda la noche, pero uno viene en cinco minutos y se lleva a tu esposa”, respondió.