La Confederación Sudamericana de Fútbol publicó en sus cuentas oficiales una nota con Carlos Sánchez palpitando la final de la Copa Libertadores, que será el próximo sábado en Maracaná entre Santos y Palmeiras a las 17 horas de Uruguay.
Si bien el mediocampista uruguayo de 36 años no juega desde el 1.º de octubre de 2020, cuando sufrió una rotura de ligamentos cruzados en la rodilla izquierda de la que aún se está recuperando, es parte importante del equipo peixe.
Incluso esa noche en la que se lesionó, Sánchez le anotó a Olimpia en lo que fue victoria 3-2 en Asunción. Fue su primer tanto en cinco presentaciones de esta Copa Libertadores, siendo titular en los primeros cinco.
El Pato llegó al equipo a mediados de 2018 y quiere quedarse hasta el final de su carrera, según él mismo reconoció. Si bien muchas veces habló de una posible vuelta a River Plate o del sueño de jugar en Peñarol, del que se confesó hincha, hoy no piensa en volver a cambiar de camiseta.
“El club es hermoso y la ciudad, impresionante. Tengo el deseo de quedarme acá y espero retirarme acá porque estoy muy cómodo. Esperemos que se pueda coronar de la mejor manera. El sueño que tengo es coronarlo de la mejor manera; levantando la Copa Libertadores”, dijo.
“Me fui a Uruguay un tiempo y me junté con muchos amigos que me decían: ‘Ese club debe ser grande, ¿no?’. Y sí, es muy grande, y no saben la gente y la hinchada que tiene, que siempre apoya y eso es importante para el jugador”, concluyó.