Por Eduardo Gudynas | @EGudynas

De un lado, la coalición multicolor se compromete a crear un nuevo ministerio del ambiente, pero que sólo será efectivo si responde a una reorganización que incorpore las áreas ambientales agropecuarias. Del otro lado, se desvanece la temática ambiental en el FA y las cianobacterias festejan.

La temática ambiental sigue presente en esta última etapa del proceso electoral uruguayo. La novedad es que en el compromiso que subscribieron los cinco partidos de oposición (la coalición "multicolor") se incluye una sección dedicada al ambiente y el bienestar animal. La cuestión más relevante es la confirmación de "crear un ministerio de medio ambiente mediante una reubicación de funcionarios y de recursos presupuestales que hoy están radicados básicamente" en el Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente. Lo que se postula es abandonar el formato de un ministerio mixto involucrado en variados temas, y en crear uno específico en la cuestión ambiental.

El compromiso firmado por el Partido Nacional, Partido Colorado, Cabildo Abierto, Partido Independiente y Partido de la Gente, sostiene que esa reorganización "asegurará un funcionamiento más ordenado y profesional, y fortalecerá las tareas de rectoría, regulación y habilitación, que pasarán a ser ejercidas con independencia funcional y autonomía técnica."

Del otro lado, en los folletos y documentos más recientes de la candidatura de Daniel Martínez, la temática ambiental casi desapareció. Por ejemplo, en un folleto que se reparte en estos días sobre "Propuestas", hay 12 de ellas, y ninguna es sobre las urgencias ambientales del país; en otro, "¿Por qué queremos a Daniel Martínez presidente?" se presentan otras 15, y tampoco hay referencias a las cuestiones ecológicas.

De este modo se consolida una situación que ya estaba planteada meses atrás, donde por un lado los partidos de oposición prometen cambios sustanciales en la política y gestión ambiental, y del otro lado, el gobernante Frente Amplio casi se desentiende de esa temática.

De todos modos, se debe llamar la atención sobre un riesgo muy relevante en la promesa de la coalición multicolor. La creación de un ministerio específico para el ambiente no puede ser un fin en sí mismo; no puede ser la simple partición de la actual cartera para crear, por un lado una de vivienda, y por el otro una sobre ambiente.

Muy por el contrario: un nuevo ministerio del ambiente debe ser la consecuencia de un reordenamiento de distintas reparticiones ministeriales, donde la urgente está en traspasar algunas de las que hoy se ubican en el Ministerio de Ganadería y Agricultura a esa nueva secretaría del ambiente. Se deben trasladar al menos las secciones encargadas de los recursos naturales, control de los agroquímicos o los bosques, al nuevo ministerio del ambiente. Este es el componente clave para intentar recomponer una institucionalidad y gobernabilidad ambiental.

Del otro lado de la arena partidaria, poco tiempo atrás los asesores en ambiente de Martínez sostuvieron que la propuesta de crear un ministerio del ambiente era "demagógica". Pero semanas después todo cambió y Martínez anunció que crearía un "Ministerio de Ambiente y Transición Sustentable" a la imagen, por ejemplo del de España. Agrego aquí un paréntesis: tengo dudas que conozcan realmente cómo funciona el ministerio español de transición a la sostenibilidad. Es que repetir ese tipo de ministerio aquí en Uruguay requeriría unos cambios ministeriales formidables tales como descuartizar el Ministerio de Industrias, Energía y Minería, ya que por ejemplo, habría que trasladar su área en energía. Nada de eso está contemplado en otros anuncios del FA.

Pero cualquiera de esas intenciones se desmoronó a los pocos días cuando se anunció que José Mujica sería ministro de agricultura en un futuro gabinete. Eso significa apostar por sus visiones de la agropecuaria y la ecología, o sea, más intensificación, y por ello más contaminación, más transgénicos y menos mecanismos de participación y consulta ciudadana, y así sucesivamente. Seguramente las cianobacterias que pululan en los distintos rincones del Uruguay han sido las que más aplaudieron esos anuncios.

El documento de la coalición "multicolor" en la sección ambiental también postula "incrementar la participación ciudadana implementando políticas públicas participativas", y una "política integrada de recuperación, monitoreo y protección de la calidad de los cursos de agua, suelos y aire, invocando la sostenibilidad y las generaciones futuras".

Esas son buenas intenciones y ojalá se concreten en medidas reales. Pero los multicolores se quedan cortos al menos en ese último punto: ya no basta seguir con los monitoreos de la calidad del agua. Entiendo indispensable acordar medidas de "emergencia" ambiental para los cursos de agua del interior del país. La situación se sigue agravando en cuanto a la calidad de nuestros recursos hídricos, y como las medidas tomadas son insuficientes se repetirán hechos como los estallidos de cianobacterias. En ese sentido, la llegada al parlamento de un partido ecologista (con César Vega como diputado), tiene las enormes potencialidades (y responsabilidades) para mejorar el trabajo parlamentario promoviendo medidas más efectivas y enérgicas.

Por estas razones, el balance es en buena medida auspicioso ya que estamos frente a una renovación de los debates ambientales en el país. No puede pasar desapercibido que es la primera vez que esta temática se cuela en un balotaje, y eso es muy bueno.


Más informaciones

El texto del acuerdo "Compromiso por el País", en: La oposición llegó a un acuerdo y el Partido Nacional divulgó el "documento base", Montevideo Portal, 5 noviembre 2019, https://www.montevideo.com.uy/Noticias/La-oposicion-llego-a-un-acuerdo-y-el-Partido-Nacional-divulgo-el-documento-base--uc734821

Sobre la reestructura del MVOTMA y la creación de un ministerio del ambiente, mi aportes en:
Un nuevo ministerio del ambiente para Uruguay, Seminario Voces, en: http://accionyreaccion.com/un-nuevo-ministerio-del-ambiente-para-uruguay/