Las encuestas sirven para todo, para enfervorizar partidarios, deprimir militantes, incentivar a contribuyentes o ahuyentarlos y para crear sensaciones térmicas a todos los niveles. Se han convertido en un protagonista fundamental de las campañas electorales. Cada vez más. Y cada uno se las lee como le parece y le conviene.

Este viernes leí dos nuevas presentaciones, la de Interconsult que aparece en Últimas Noticias y la de Factum en El Espectador. En ambas aparece un elemento nuevo, o relativamente nuevo. Partiendo de la base de que existe efectivamente una diferencia en las encuestas a favor de Mujica sobre Astori y de Lacalle sobre Larrañaga comienzan a interrogar y a interrogarse sobre resistencias, sobre posibilidades hacia las elecciones de octubre.

Título de la nota de Ultimas Noticias: "Lacalle es favorito ante Mujica, según encuesta" Y agrega: "Aparentemente, el principal factor que parece jugar a favor de la candidatura de Luis Alberto Lacalle (Unidad Nacional) radica en la percepción que predomina dentro de la población, y principalmente el elector nacionalista, de su mayor fortaleza para enfrentar a (José) Mujica en octubre y ‘sacar al FA´ del gobierno, explica el informe al que accedió Ultimas Noticias".

Interconsult preguntó, durante el 17 y el 24 de mayo en 980 hogares, cuál de los dos precandidatos blancos sería el más indicado para enfrentar al oficialismo. La pregunta concreta fue: "Pensando en Lacalle y Larrañaga, ¿cuál cree que sería el mejor candidato del P. Nacional para enfrentar a Mujica en un balotaje?". A esto, un 50,9% del total respondió Lacalle, un 34,2% Larrañaga, y un 1,6% "ambos".

En el caso de Factum es todavía más interesante, porque mientras el 66% de todos los entrevistados correspondientes a todos los partidos opinan que será Mujica que ganará las elecciones internas en el FA, ante la pregunta "Imagine que tiene que elegir entre estas personas y no puede dejar de elegir. ¿A quién prefieren como presidente de la República?". El 52% prefiere a Astori y el 40% a Mujica. ¡12 puntos de diferencia!

También Factum divulgó el jueves en Canal 4 una encuesta donde consultó a la población a qué candidato nunca votaría. En el total de la población, el 47% nunca votaría a Luis Hierro, 43% a Pedro Bordaberry, 36% a Mujica, 34% Lacalle, 29% Marcos Carámbula y José Amorín, 24% Danilo Astori, y 20% Larrañaga. También aquí hay 10% de diferencia entre ambos candidatos de la izquierda en el total del electorado.

No hay que ser por cierto una luz de la política ni de las estadísticas para concluir que Astori tiene muchas mejores posibilidades que Mujica de ganarle las elecciones a la derecha, a los partidos tradicionales coaligados. Y eso si es bastante abrumador en la calle, en la "sensación térmica". Se habla poco, se posterga para después, pero ese es un tema de primera importancia. Para parar el "malón" de la derecha hay que ganarle las elecciones.

También es cierto que la campaña que comenzará el 29 de junio será totalmente diferente a las internas, se terminaron los eufemismos y las finuras y comenzará el verdadero fuego cruzado. Y es allí que viene a cuento el 3 x 2. La estrategia de la derecha en esta etapa es clarísima y evidente y se nota a la legua en el uso y abuso de los medios de comunicación vinculados al poder y como han operado a lo largo de muchos años y en estos últimos meses. Ellos ya eligieron a que candidato de izquierda quieren y apoyan. Y dejo constancia que en esa elección de los medios no hay ninguna responsabilidad de los favorecidos.

El poder tradicional está montando la más grande y potente ofensiva política para sacar a la izquierda del gobierno. Están en lo suyo y es totalmente comprensible. Es parte de los méritos de esta izquierda en el gobierno que no se mediatizó, no se desdibujó y que genera más ferocidad que antes de parte de la derecha. No me vengan con el cuento de que izquierda y derecha son categorías superadas, porque eso sólo se lo creen y lo dicen los derechistas vergonzantes.

La derecha se expresa en una combinación de tres grandes vertientes: las direcciones de las dos fuerzas políticas tradicionales, blancos y colorados que aún con matices y pequeñas diferencias son la expresión política de este proyecto; segundo las corporaciones sociales de la derecha que quieren recuperar el control a toda costa, no hacen cálculos menores, no evalúan resultados y para desazón de algunos charlatanes de izquierda, llegada la hora se forman como un solo hombre en las huestes de esta batalla restauradora. Y tercero los medios de prensa de la derecha, los del poder los que siempre formaron parte de su esquema y de sus preferencias, los que se deben mutuamente todo entre políticos y propietarios de esos medios. Algo cambiaron, pero llegado el momento entre el profesionalismo y los intereses políticos se suman al malón.

Lo hicieron siempre, en el voto amarillo y verde, en las anteriores elecciones y en esta jugarán duro, muy duro. Y muestran su hilacha en esta campaña previa. Ya veremos a partir de julio como el olfato los guía con toda ferocidad hacia su presa: el poder.

Y los errores o peor aún las inconsistencias programáticas que aparentemente no tienen impacto en la interna del FA si lo tienen en el conjunto del electorado. Algunos graves errores que demuestran un pobre conocimiento de cómo funcionó este gobierno y cuales fueron las bases sobre las que se construyó su éxito, comienzan a impactar en el conjunto del electorado, de ese electorado que necesita el FA para ganar las elecciones.

Lo que suena a veces muy tentador y muy "inconformista" a nivel de determinados sectores de opinión más próximos o propensos a votarnos, suena muy mal y muy peligroso para una parte muy importante de la sociedad. Y esa ventaja ya comenzaron a aprovecharla los partidos de derecha. Lacalle será candidato blanco porque la derecha y el centro derecha que quieren recuperar el poder lo perciben claramente como el que tiene las mejores condiciones para sacar al Frente Amplio del Gobierno y Lacalle con su tradicional y fino olfato del poder ya eligió cual es el candidato que prefiere. Sabe que a Astori no le gana las elecciones.

Este no es un tema de encuestas solamente, yo recomiendo vivamente a los lectores de esta columna que lean el reportaje al compañero Mujica en Brecha del viernes pasado. Con gran honestidad expone su visión de la sociedad uruguaya, de cómo manejar la presidencia de la República, de que papel tiene la economía y como manejarla y sobre todo que visión tiene de Astori y de la derecha. No se guarda nada refiriéndose al Ministerio del Interior afirma "...es más fácil lidiar con el Ministerio de Economía, porque en definitiva es una cuestión técnica, le podés dar toda la derecha a la técnica y chau, la mejor manera de hacer política es darle la derecha a la tecnología. Pero en este otro ministerio agarrá a los milicos..."

El compañero Mujica demuestra no sólo que de economía en general y en particular de políticas económicas y sociales no sabe mucho, sino que además no entendió las razones por las que este gobierno tuvo sus éxitos. Todo el reportaje es un documento muy claro en este sentido.

Una vez más destaca el compañerismo y la actitud de respeto hacia otros compañeros: "En Economía haré una maniobra de entrada lo más a la derecha que pueda, tipo Lula cuando llegó....". Pregunta de los periodistas: "¿Ofrecérselo a alguien proveniente del astorismo sería una entrada a la derecha? - No se si a la derecha, pero al menos dejaría la gente tranquila."

Y que viva la unidad, la concordia y el respeto. Y que todo sea para que la gente quede tranquila...