Contenido creado por Inés Nogueiras
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Ganó Lacalle. No pasa nada...

Ganó Lacalle. No pasa nada...

Utilicemos por un momento la memoria, la imaginación, la crítica y saquemos conclusiones. No es imposible. Luego de varios programas de televisión, presentaciones en la Rural, entrevistas, agendas cariñosas, declaraciones de asesores y desmentidos varios, se puede. Ya tenemos además ministra de Economía, ministro de Educación y Cultura y posible ministro del Interior designados.

30.09.2014

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2014-09-30T06:01:00-03:00
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Al comienzo fue la negociación. Febriles contactos entre los blancos internamente para luego ir a negociar con los colorados todo, absolutamente todo, porque sería la primera vez en la historia nacional que no gobernaría el partido más popular, el que tiene más apoyo electoral. Que el Frente Amplio es la primera fuerza política del país no está en discusión ni en la más delirante de las encuestas.

Suspenso e incertidumbre, aunque al final se ponen de acuerdo. La única duda es cuándo se divorciarán por riñas y disputas como sucedió tantas veces, en particular en medio de la crisis del 2002 con abandono del hogar en medio del vendaval por parte de los blancos.

Siguiendo la historia de 15 años de gobiernos tradicionales, deberán decidir si le dan participación en los entes y bancos del Estado a otras fuerzas políticas, porque la historia muestra que el 3 y 2 les fue funcional y cómodo toda la vida y excluyeron hasta el 40 % del electorado del FA (1999). Eso sí, democráticamente.
En la danza de nombres aparecen obligatoriamente los viejos dirigentes del herrerismo y de la conducción económica colorada. Inexorablemente.

Se inicia el proceso restaurador nacional. Con la elaboración del presupuesto quinquenal se termina definitivamente "La Positiva" para amplios sectores sociales, para la inversión social, la educación, la salud, la innovación tecnológica. Las intendencias de todos los pelos comienzan a ponerse nerviosas, recuperan violentamente la memoria y recuerdan viejas épocas de dificultades financieras de todo tipo y de tensas relaciones con el gobierno nacional.

Se convoca en su momento a los Consejos de Salarios porque las promesas electorales están demasiado frescas. Comienza el reequilibrio. La delegación del gobierno equilibra a diestra y a diestra y ata cualquier aumento salarial al aumento neto de la producción y de las ganancias, y las cláusulas de desenganche por el estornudo de un esquimal son votadas a cuatro manos. Dos manos patronales y dos del gobierno. Y la gente, los trabajadores que consideraban que el aumento constante de los salarios y de las condiciones laborales eran una conquista irreversible y celestial, se despiertan. Y se despiertan muy, pero muy enojados. Los jubilados descubren que se terminó la bonanza y sobre todo las esperanzas de seguir mejorando. Están enojados y frustrados.

Las luces amarillas anunciadas por el equipo técnico económico blanco hay que apagarlas, porque son un designio básico de la suprema religión liberal: la macroeconomía, así que comienza el ajuste anunciado en medio de la humareda. Y de las luces amarillas se pasa a las anaranjadas y a las alarmas titilantes y rojas en materia de crecimiento, de consumo, de ingresos familiares y naturalmente todo tiene su explicación oficial: el viento de frente. Así como los gobiernos del Frente Amplio tuvieron viento de cola, ellos, orinados por una manada gigantesca de elefantes en celo, son presa de la mala suerte tradicional y reciben fuertes ráfagas de viento contrario desde Argentina, Corea del Norte, República Malgache y negros nubarrones que se adensan en las islas Fiji.

Por todas esas razones, en pocos meses el principal capital acumulado por la sociedad uruguaya, la confianza, la autoestima, el espíritu emprendedor y audaz, es sustituido por el recurrente verso de los efectos adversos y huracanados de la situación mundial y regional.

Revisando cifras, los expertos blancos, que en la crisis del 2004 consideraban que estábamos mejor que nunca y en el manejo de la tecnocracia absoluta para dirigir la economía, descubren que todas las cifras manejadas alegremente durante la campaña electoral son un enorme bluf y que las promesas no se pueden cumplir, así que afilan sus acerados argumentos: se terminó la bonanza y nos dejaron un déficit fiscal que hay que bajar a toda costa, sobre todo a costa vuestra, la de la mayoría de los uruguayos.

Por lo cual el Antel Arena, el Centro de Convenciones de Maldonado y otras muchas obras son abandonadas a la espera de que batan un nuevo récord Guiness, como el edificio de la Plaza Independencia o el complejo del Sodre, que fueron terminados en más de 40 años, superando los tiempos constructivos de las pirámides de Keops. Eso sí, constructores amigos del Banco Hipotecario edifican en lugares especiales de Montevideo varios complejos de avanzada arquitectónica bautizados en honor al pasado como "CH20 pa´ todo el mundo". Se organizan cruceros especiales para visitarlos.

En poco tiempo el IRPF baja drásticamente su recaudación, no tanto por los amagues de reducción nunca ejecutados realmente sino porque el país vuelve a los niveles tradicionales de crecimiento: 1 % con suerte y viento a favor...

La preocupación especial ahora es que el PACO, el partido blanco y colorado unidos indisolublemente, reconquisten Montevideo de los bárbaros izquierdistas que la gobernaron durante 25 años. La gente comienza a sentir una leve sospecha de que detrás de la gran humareda había algo más que atléticos personajes embanderados y que la dura realidad siempre aparece. Y aparece en toda su enormidad y dramatismo.

La agenda de los ositos cariñositos es declarada ganadora del concurso del "Gran Cuento Nacional".
El BROU, que en los diez años anteriores había obtenido 1800 millones de dólares de ganancia, anuncia que ha vuelto la buena época de los préstamos a diestra... y sobre todo a diestra y que la plaza financiera es parte del destino nacional. Una abierta y generosa plaza financiera. Los productores rurales recuperan la sana costumbre de preguntar varias veces antes de embarcar ganado o cualquier cosa de qué banco son los cheques y a qué frigoríficos van los ganados. Por las dudas...

La residencia de Suárez recupera todo su esplendor y su elegancia, despojada de ocupas indeseables y mal vestidos. Otra vez es un punto de referencia patricio para toda la nación.

La educación se encamina a pie, porque en pocos años el valor fundamental que rige los destinos pedagógicos nacionales se basa en el sacrosanto principio de que hay que darle a la educación pública los recursos que correspondan a su rendimiento en las pruebas Pisa. No mejoramos pero al menos nos sale más barato y le damos bonos para que cada uno vaya a la escuela privada que prefiera con financiación estatal. Style Chile.

Se decreta una amnistía absoluta, total e irrestricta y el olvido más pleno de todo el pasado previo al 1 de marzo del 2005 y en especial de los años de plomo de la dictadura. Se prohíbe el uso de lentes en la nuca para que nadie mire hacia atrás. El discurso oficial bicolor (¿o tricolor?) concentra todas las pestes de Egipto y sus alrededores en los gobiernos del FA, en la cultura de izquierda, el teatro de izquierda, la música de izquierda, la prensa de izquierda, y a partir de ese momento se decreta el fin de la derecha y de la izquierda, todo es parejo e indiferenciado.

La genial idea de la Guardia Nacional, que sustituye una parte de la Policía y otra de las Fuerzas Armadas, es un fracaso estrepitoso, pero al menos algunos canales y medios de comunicación se compadecen de los uruguayos y cambian los partes diarios de rapiñas y hurtos en Uruguay por torneos del golf alucinantes y peligrosos en el circuito de Calcuta y Sidney.

En pocos años los autos de la Policía se transforman en la chatarra de antes y se completa el pago a los efectivos con bolsas de alimentos vencidos, o se les entrega oportunamente polenta en el mes de enero para adaptarse al menú veraniego. Y tenemos huelgas de todo tipo, incluyendo huelgas policiales.

Pasados algunos meses y aprobadas las nuevas leyes contra la delincuencia que se basan en la particular filosofía del diputado Germán Cardoso, de singular y destacado papel en la seguridad nacional, de que todos los uruguayos somos culpables hasta que demostremos lo contrario, si se tiene la desgracia de tener menos de 18 años hay que demostrarlo tres veces. Las rapiñas y los hurtos no disminuyen ni crecen, sino todo lo contrario.

Obviamente ha llegado la época de las obligaciones y el fin de esos derechos liberales y disolventes. Se revisan diversas leyes aprobadas en la nefasta época de gobiernos de izquierda. Se vuelve a penalizar el aborto, hay que ser puro macho o pura mujer para casarse y la marihuana vuelve a la clandestinidad y es la euforia comercial de los narcos, que recuperan el 60 % de su negocio.

Y el país lentamente va recuperando el color tradicional de los anteriores 50 años, un gris pérfido y cargoso vuelve a invadir bolsillos, consultorios, fábricas, parques y campos, liceos, facultades, teatros, comercios y sobre todo el alma de los orientales.

Asumo que hay matices un poco exagerados en esta descripción, pero en lo fundamental es tendencialmente lo que sucedería. A no quejarse, cinco años pasan rápido...

PD. En Twitter algunos colegas de la red se quejan de que me ocupo demasiado de un candidato ajeno. Error: no es ajeno y quiere ser presidentes de todos los uruguayos, y eso tiene directa relación con mi vida y la de los míos durante los próximo cinco años. Nada de eso me es ajeno.