Me presento: soy un votante del Frente Amplio en las últimas elecciones del 2004. Fue la primera vez que me animé a darles el voto. No les presté el voto, yo no presto mi voto, lo doy seriamente y lo confirmo o lo cambio con la misma seriedad. Prestarlo es otra cosa.
Han pasado casi cuatro años desde que el presidente Vázquez está en el gobierno y obviamente como cualquier persona normal y sensata lo primero que me pregunto es si mi voto fue acertado o me equivoqué. Si la pregunta la contesto desde mi situación personal tengo que decir que estoy bastante mejor que durante los gobiernos anteriores. No voy hacer el detalle, pero estoy más tranquilo, más confiado en que podremos salir adelante y que tenemos oportunidades. El boliche anda bastante bien, la gente tiene más plata y gasta más.
Si miro a mi familia y mis amigos, no todos están mejor y más conformes, pero la mayoría sin duda está en la misma situación que yo. Algunos lo reconocen y lo dicen a los cuatro vientos, otros más bajo, pero lo principal se comprueba: hay más confianza y serenidad. No están conformes con todo – creo que eso es casi imposible – pero hasta algunos que no votaron por el Frente, reconocen que las cosas mejoraron mucho.
Si tuviera que resumir lo fundamental de la nueva situación, diría que no hubo ni cambios espectaculares, ni se produjo el desbarranque que nos anunciaban los otros partidos políticos y que si se nota mucho más consumo, más serenidad y oportunidades de trabajo, mejor servicio de salud y lo reitero, se terminó ese bajón permanente de los años anteriores. Ya no nos arrastramos todos quejosos y sin ánimo. También tengo que reconocer que aunque en menor cantidad, algunos conocidos se siguen yendo del país. A esta altura no se si eso tiene remedio. También regresó una familia de conocidos.
Hoy el tema que más me preocupa es el de la inseguridad. Porque en las conversaciones familiares y entre amigos siempre sale alguna anécdota y porque los canales y las radios están también relatando asaltos y robos. Y si lo hacen es porque esas cosas suceden. Aunque le carguen las pilas al tema, no se lo inventan. Es lo único importante que me preocupa y que hemos conversado varias veces con mi esposa. Ahora nos quedamos despiertos hasta que regresan los chiquilines el sábado de noche.
Estoy contento con mi voto, no me arrepiento para nada. Y sin embargo estoy desorientado como enano en procesión. Lo que veo de los dirigentes del Frente Amplio es una enorme confusión, una pelea despiadada hacia las próximas elecciones. Mire para donde mire me confundo más.
El presidente dijo y lo repitió varias veces que no quiere ser candidato, que el no quiere dividir el país en un debate sobre la reelección y una vez más demostró que es un gran presidente y todavía más importante, es un gran uruguayo. No tengo duda que es uno de esos que pasará a los libros de historia de la mejor manera. Pero todos los días se promueve la reelección...(¿¿??).
Por otro lado la danza de nombres para la candidatura a presidente y a vice en las próximas elecciones es interminable e infernal. Cada dirigente da una versión diferente y más retorcida, y algunos cambian de opinión en la misma semana, el mismo día. Es una gran tómbola de nombres. Da la impresión que el poder les preocupa más que cualquier cosa.
Yo no quiero volver a votar a los que se equivocaron feo en los anteriores gobiernos, pero tampoco se como decidir en medio de tanto tironeo y confusión de parte del Frente Amplio. El gobierno actual me conforma, pero yo tengo que pensar en quien gobernará a partir del año 2010 y parece que la situación mundial se viene complicada.
Los partidos de la oposición se pasan todo el día anunciando que se nos viene el ciclón encima, y creo que de tanto mentarlo en realidad lo están convocando para que los ayude en sus pretensiones de volver a gobernar. No me suena muy patriótico, cuando tendríamos que unirnos o buscar soluciones entre todos.
El Frente en lugar de explicar cuales son sus planes para el próximo gobierno – no creo que alcance con seguir haciendo las mismas cosas – se dedica a discutir y a pelearse por las candidaturas. Y yo veo volar los ladrillazos, y algunas propuestas que me asustan.
Si miro hacia atrás tengo que votar sin falta al Frente, pero no me alcanza, lo que voy a elegir es un presidente y un gobierno para adelante y es allí que me desoriento, dudo. No me da lo mismo cualquiera. Porque en este gobierno también hubieron buenos ministros, buenos directores, pero también de los otros. No todo fue y ni puede ser perfecto.
Los partidos tradicionales ya comenzaron con la campaña, ellos tienen todo claro y encaminado, se sabe quienes serán sus pre candidatos, y saben que su centro es atacar al gobierno. Y lo hacen constantemente. Supongo que ese debe ser su papel.
Del otro lado veo y escucho poca gente defendiendo al gobierno. No entiendo, eran tan locuaces antes, cuando estaban en la oposición y ahora parece que se han vuelto todos neutros, todos técnicos asexuados. Les falta garra para explicar lo que han hecho y sobre todo para proponernos y explicarnos lo que harán. Y yo sigo desorientado.
No entiendo mucho de política, ni quiero ser un especialista, pero como converso bastante con la gente, con los que vienen al boliche, con la familia, tengo algo bien claro la confusión no es sólo mía, habemos unos cuantos. Y no pedimos mucho, pedimos una sola cosa: que elijan una formula de candidatos que nos de garantía de que se hará lo mejor de este gobierno y las cosas nuevas que hay que cambiar. Una fórmula que gane las elecciones. No debe ser tan difícil. Eso si, si dejan que la confusión se extienda, no se lo que puede pasar. Hasta pueden volver los otros, los de siempre. Y a después a llorar al cuartito.
Y que no nos vengan a echar la culpa a nosotros, a los de a pie, son ellos los que tienen que decidir.
Yo cuando hay mucha confusión me hago preguntas, me ayudan a ordenarme:
¿ Quien es la persona que en el gobierno actual aprendió más, tiene más experiencia de lo que se necesita para ser un buen presidente? No hay duda, el actual presidente.
¿Qué formula electoral propuso Vázquez?
Qué hay tormenta mundial nadie puede dudarlo ¿no deberíamos elegir a alguien que ya demostró que sabe manejar el barco de la política económica con seguridad y firmeza?
Son preguntas.