Las especulaciones sobre la integración de los grupos terminaron con el sorteo. Sin embargo los comentarios siguieron y se globalizaron.
Es bastante ilustrativo un comentario de Bilardo, que rompió el fuego hace ya bastante tiempo:"No quiero que Uruguay se clasifique para el Mundial porque, si lo logra, impedirá que Holanda sea cabeza de Serie y, entonces, ésta puede caer en la serie de Argentina".
Varios jugadores españoles se quejaron de lo injusto del sorteo, porque acabó poniendo en la misma serie a los finalistas de Sudáfrica (y no creo que les falte razón: sería mucho más razonable que los Cabezas de Serie que acompañan al Organizador fueran los mejor clasificados del Mundial anterior, o sea que esas posiciones se ganaran en campeonatos y no surgieran de la Clasificación FIFA, que es una dudosa representación del poderío de los equipos).
Quizás el comentario más jugoso sea el de Scolari que, cuando le preguntaron si la serie de Brasil es buena y si no está preocupado por tener que enfrentarse a España u Holanda en los octavos de final, dijo que la serie es la que le ha tocado y que tanto la serie como los rivales de los octavos de final, no importan demasiado para un equipo como Brasil, que se está preparando para ser Campeón del Mundo. Sin embargo, luego de afirmaciones tan rotundas, acabó mostrando una preocupación: "No quiero jugar contra Uruguay".
Muchísima gente del fútbol, más cerca o más lejos, se ha referido al sorteo y a la serie de Uruguay como "la serie de la muerte".
Sobre otro asunto, de una manera diferente por separado, pero coincidiendo en los conceptos, se expresaron Ken Dalglish (una de las grandes glorias del Liverpool inglés y su anterior Director Técnico) y BrendanRodgers (actual Director Técnico). Ambos se mostraron preocupados por los defensores ingleses y lo dificultoso que será para ellos tratar de marcar a Luis Suárez. Quizás soy muy mal pensado, pero creo que ellos dos hincharán por Suárez y no por los ingleses ....
Personalmente, he estado viajando la semana pasada y he visto, por ejemplo en New York, un interés inusual en Uruguay luego del sorteo.
Reafirmando lo dicho antes, sigo pensando que no tiene mayor importancia ser Cabeza de Serie. ¿Podemos, a priori, pensar en una serie más difícil que una que incluya tres Campeones del Mundo?
Otro asunto importante es la falta de realismo con qué los organizadores planificaron los diferentes partidos / sedes.
Antes cada serie se desarrollaba básicamente en una ciudad, luego se empezaron a colocar más ciudades, luego se comenzó a organizarlo de manera que en una ciudad hubiera partidos de diferentes series, generalmente privilegiando intereses económicos por sobre los deportivos.
Eso funcionó perfectamente, por ejemplo, en Alemania: muchas ciudades en un territorio pequeño, donde el medio de transporte básico es el tren y funciona muy bien.
Cuando se trata de llevar las mismas ideas a un país con un territorio enorme como Brasil donde, además, el ferrocarril no existe y las distancias son demasiado largas para hacerlas por carretera, las perspectivas son complicadas para los equipos y caóticas para los hinchas.
¿Cómo es nuestra serie?
Costa Rica, Inglaterra e Italia son nuestros rivales de la Serie D.
Podríamos asustarnos y pensar que es imposible.
También podríamos caer en simplificaciones excesivas: Si le ganamos a Italia o Inglaterra sellaremos nuestra clasificación, porque los tres le ganaremos a Costa Rica.
O, más arriesgado aún, sabiendo que Italia es especialista en empates, busquemos también el empate con Inglaterra y definamos la serie por la diferencia de goles que acabemos convirtiéndole a Costa Rica.
Todo esto es irresponsable y especialmente peligroso:
Un buen recuerdo para confirmarlo es el de la "serie / semifinal" entre Argentina, Brasil e Italia, jugada en España 1982.
La Argentina de Maradona, vigente Campeón del Mundo, era mucho más que Italia y estaba segura de ganarle, pero también estaba segura de que Brasil le ganaría, entonces era esencial golear e Italia y Argentina lo intentó.
Italia sólo se defendía, Argentina dominaba, pero el gol no venía.Los minutos pasaban y seguía el 0 a 0 (en realidad el árbitro también ayudaba porque el jugador Gentile, que marcaba a Maradona, hacía gala de todo tipo de brutalidades sin que el árbitro se diera por enterado).
De a poco Argentina fue dejando toda precaución de lado. En un contragolpe aislado Italia se puso 1 a 0, ahí Argentina pasó a estar completamente desesperada y no consiguió el empate (que entendía que tampoco le servía). Casi al final, en otro contragolpe,Italia hizo el segundo.
Aquel equipo italiano, que se había clasificado en la serie a duras penas, acabó Campeón del Mundo y Argentina eliminada.
¡Cuidado con Costa Rica! Ningún partido está ganado a priori ni perdido a priori, los rivales son tres y no dos.¡Hay que disputar con todo cada partido!
Otro recuerdo es el del Mundial de 1950: Argentina, Brasil y Uruguay tenían un muy buen fútbol pero, en el caso de Uruguay, hacía 19 años que no se enfrentaba a equipos europeos.
La suerte (¿o la mala suerte?) quiso que, por desistimiento de dos equipos europeos, Uruguay quedara en su serie sólo con Bolivia, ala cuál derrotó 8 a 0 sin dificultades.
Por su parte, Brasil tuvo en su serie a dos equipos europeos, enfrentó dificultades porque era un fútbol diferente, pero se adaptó y logró un empate y un triunfo apretado contra ellos.
Al ir a la rueda final por puntos, el fútbol europeo no era novedad para Brasil, pero sí para Uruguay.
Primera fecha: Brasil 7, Suecia 1; Uruguay 2, España 2
Segunda fecha: Brasil 6,España 1; Uruguay 2, Suecia 1
O sea: Brasil conocía bien el fútbol europeo y ganó sin despeinarse, Uruguay estaba aprendiendo y sufrió mucho y logró resultados similares a los obtenidos por Brasil en la serie.
Ante los resultados numéricos y sin tener en cuenta que Brasil y Uruguay tenían equipos muy parejos y que se conocían mucho, casi todos pensaron que Brasil iba a golear a Uruguay.
Los hechos dicen lo contrario.
Aprendamos de este antecedente que es bueno que juguemos con equipos europeos difíciles al principio (cuando empates o aún derrotas pueden servir) para estar mejor preparados para las etapas eliminatorias posteriores.
La nuestrano será una serie "relativamente fácil", como, por ejemplo, "aparentan ser" las de Argentina (Bosnia Herzegovina, Irán, Nigeria) y Brasil (Croacia, México y Camerun).
Sin embargo, si nos clasificamos, los octavos de final (contra Colombia, Grecia, Costa de Marfil o Japón) parecen más accesibles.
Argentina, si clasifica en la serie, también tendrá rivales accesibles en los octavos de final (Suiza, Ecuador, Francia u Honduras).
Brasil, en cambio, puede tener rivales más complicados (España, Holanda, Chile o Australia)
Se ha habladode fraude en el sorteo y se han tejido historias para legitimar las sospechas. Mi pregunta es: ¿fraude para beneficiar a quién? Obviamente al Organizador que puede aprovechar de mala manera pequeñas ventajas. ¿Este sorteo favoreció a Brasil?
Para quién pretenda ser Campeón del Mundo (y sin duda Brasil lo pretende) y no simplemente pasar la serie, Brasil tiene una situación más difícil que Argentina y Uruguay.
¿Cuáles son los favoritos?
Siempre los favoritos salen de la lista de los Campeones del Mundo (hoy Uruguay, Italia, Alemania, Brasil, Inglaterra, Argentina, Francia, España) y uno o dos equipos más. Estos candidatos adicionales, durante mucho tiempo fueron España, que casi siempre insinuó su favoritismo, pero a la hora de la verdad no lo ratificó en la cancha, salvo en Sudáfrica y Holanda, que llegó varias veces a la final pero nunca pudo ganar).
¿Y de esta lista, a cuáles escogemos cómo favoritos?Muchos hablan de Brasil y España.
Hay un dato estadístico, que no es más que eso, pero que tiene su importancia: ¡nunca un equipo europeo fue Campeón Mundial en América! Si nos guiamos, entonces, por los antecedentes, los favoritos serían Brasil, Argentina y Uruguay.
Creo que el gran favorito es Brasil y le siguen Argentina y Alemania.
Uruguay, si consigue llegar con sus jugadores más importantes en su nivel actual o superior y sin lesiones, y si aprovecha bien el tiempo (relativamente corto) que tendrá para preparare en Brasil, se transformará en un rival de cuidado para cualquiera y nada le está vedado a priori.
Otro antecedente importante es que, mientras las Eliminatorias son siempre muy difíciles para Uruguay, este tipo de campeonatos cortos (Copa América, mundiales, etc.) le sienta muy bien.
¡El potencial existe!, el equipo tiene muy buenos jugadores y está en las mejores manos.¡Esperemos con fe!