Los dos primeros fueron procesados por "abuso innominado de funciones" sin que la fiscalía ni las juezas actuantes los acusaran de enriquecerse. Tampoco hay una sola persona que sospeche siquiera que Mujica, que no fue procesado ni denunciado por nada, reciba beneficios económicos de su amistad con Gustavo Torena o Tenfield. Al menos no en principio.
Suele asociarse la corrupción con la conducta del funcionario que se enriquece otorgando favores de manera indebida. El favor se paga con dinero y el funcionario aumenta su patrimonio. Este tipo de conductas está tipificada por el Código Penal en el capítulo sobre delitos contra la Administración Pública.
El artículo 162, donde se establece el delito de "abuso de funciones en casos no previstos especialmente por la ley", no está allí sino en el capítulo siguiente, que se refiere a la comisión de actos arbitrarios en perjuicio de la Administración o de los particulares. El abuso de funciones podrá no expresar una intención de enriquecimiento pero suele revelar un interés de beneficiarse políticamente.Aunque su constitucionalidad ha sido cuestionada por el sistema político, no es menos delito que el soborno o la concusión.
¿Quién se beneficiaría políticamente de los "actos arbitrarios" que buscaban extender el plazo de empadronamiento o avalar ante el Banco República el remate de los aviones de Pluna? Si se piensa al revés, es decir, quién pagaría el costo político de la pérdida de recaudación o de divisas por una gestión mal hecha, el asunto queda aún más claro.
El presidente Mujica no estáinvolucrado judicialmente en estos casos ni aparecen aspectos delictivos en su particular vínculo con la empresa Tenfield. Un hombre que anda en un viejo Fusca y que predica contra el consumismo noparece susceptible de ser coimeado. Pero no puede decirse lo mismo de su vínculo con la política, a la que dedicó su vida. Mujica construyó uno de los sectores con mayor apoyo popular de la política nacional. Cuando llegue el momento de recaudar para financiar la campaña, ¿quién se beneficiará de los vínculos con empresarios que entran a la Presidencia como Perico por su casa y hacen negocios invocando su amistad?
El dinero y el poder son dos caras de la misma moneda. Pueden utilizarse para vivir frívolamente o para aliviar el dolor ajeno, para liberaral prójimo de las cadenas que lo esclavizan o para someterlo. El Código Penal no dice nada sobre el destino que los administradores le den al dinero o al poder que obtienen violando sus preceptos.
Cuando los dirigentes políticos y los gobernantes respaldan ciegamente a sus compañeros en desgracia, se olvidan de estos aspectos de la ley y de la ética. Más que eso, se olvidan también que todos los estamos mirando.