"Es la herramienta que realmente prefiero", indicó Droste, quien además es jefe del hospital universitario Charité de Berlín, uno de los más grandes de Europa.

La aplicación informaría rápidamente a las personas cuando han tenido contacto con personas infectadas. Tanto en Alemania como en otros países europeos, la idea se está debatiendo desde hace varias semanas.

Drosten observó que hasta ahora, las autoridades sanitarias han perdido mucho tiempo en la investigación de las personas de contacto.

El presidente del Instituto Robert Koch (RKI), Lothar Wieler, también consideró esta solución en repetidas oportunidades como una idea sensata.

El científico del RKI Dirk Brockmann indicó, también en el podcast, que para poder reconstruir eficazmente los contactos, cerca de la mitad de la población tendría que utilizar dicha aplicación.

Agregó que hasta ahora, la protección de datos se ha considerado un obstáculo importante en Alemania. El experto dejó en claro que es importante tener en cuenta el carácter voluntario de su uso ya que no se trata de una vigilancia sobre datos sensibles, sino de un "experimento participativo".

El Instituto RKI publicó el martes otra aplicación para la pandemia que permite a los ciudadanos donar datos de salud a partir de rastreadores de fitness y relojes inteligentes.

Los científicos quieren usarlo para sacar conclusiones sobre la propagación del nuevo coronavirus. Brockmann informó que hasta ahora se registraron 160.000 personas, lo que considera una sorpresa muy positiva.

AFP