A finales del siglo XIX, el pecarí (Pecari tajacu), una especie nativa de nuestro territorio, se extinguió en el Uruguay tras haber estado presente durante cientos de miles de años.
El humano, decisivo en la desaparición del pecarí, fue también clave en su retorno más de cien años después. A comienzos del siglo XXI, a instancias del bioparque M'Bopicuá, de Montes del Plata, se inició un proyecto con el objetivo de reintroducir a este especie, que según los primeros reportes de exploradores europeos se encontraba en grandes cantidades en la Banda Oriental.
Después de varios años de coordinación con la Dinama y de un trabajo especial sanitario y de dieta, hace tres años un grupo de 100 pecaríes fue liberado en el Uruguay, regresando así de la extinción. Poco tiempo después, se liberó otro grupo en otro punto del país.
Pese a que cazadores furtivos mataron algunas decenas de ejemplares poco después de que fueran liberados, el trabajo de monitoreo realizado en los últimos años demostró que la especie está presente y se está reproduciendo. En Uruguay está prohibida la caza de especies silvestres, pero en este caso la situación es aún más delicada por tratarse de una especie reintroducida, que necesita afianzarse en esta etapa.
Por eso mismo, generó gran preocupación lo ocurrido hace pocos días en la zona de Río Negro, cerca de la colonia Kennedy y el pueblo Sacachispas.
Un video muestra cómo varios cazadores, tras acorralar a un grupo de pecaríes y obligarlos a meterse en el río Negro, los persiguen en una lancha a motor y los van matando uno a uno. Las cabezas de los pecaríes van desapareciendo de la superficie a medida que disparan.
Según supo Montevideo Portal en base a fuentes policiales de Río Negro, algunos de los cuerpos de los pecaríes no fueron recuperados por los cazadores y aparecieron en la orilla del río.
Desde la Policía de Río Negro explicaron que se hizo la denuncia del hecho y se harán recorridos en la zona para prevenir estos hechos en el futuro. También hay coordinación con el personal de seguridad rural de Soriano. "Largaron los perros para que corretearan a los pecaríes para el río y ahí los mataron", señalaron.
Jorge Cravino, asesor de la Dinama, dijo a Montevideo Portal que esta situación preocupa especialmente por tratarse de una especie que forma parte de la fauna silvestre, al haber sido reintroducida después de estar extinta mucho tiempo.
Explicó que fueron los dueños de un campo cercano los que realizaron la denuncia policial y que el tema debería ser seguido por el departamento de Fauna, de la Dinama. "El tema es que trabajando en Fauna hay solo dos personas contratadas, no ha entrado nadie en los últimos 30 años; es como si estuviera desmantelada", afirmó Cravino.