Investigadores han descubierto que la tecnología de la NASA desarrollada para su uso en la Estación Espacial Internacional también podría usarse para cargar vehículos eléctricos a un ritmo mucho más rápido de lo que es posible actualmente.
La compleja técnica de enfriamiento, que se ha desarrollado para ayudar a ciertos sistemas eléctricos en el espacio a mantener las temperaturas adecuadas, puede entregar casi cinco veces la corriente de otros cargadores de vehículos eléctricos, que funcionan actualmente en el mercado, dijo la NASA en una publicación de blog.
Las corrientes eléctricas más altas generan más calor; esto significa que cuanto más corriente fluya, mayor será la probabilidad de que los componentes se sobrecalienten.
El complejo sistema de transferencia de calor de la NASA, conocido como "ebullición de flujo subenfriado", puede enfriar cables que transportan altas cargas, lo que permite un flujo de electricidad más rápido sin el riesgo de que los componentes se sobrecalienten.
En el blog, la NASA dijo que el sistema había sido desarrollado para ayudar a entregar "sistemas de energía de fisión nuclear para misiones a la Luna, Marte y más allá''.
El tiempo de carga actual para los vehículos eléctricos varía desde menos de 20 minutos en algunas estaciones públicas de carga rápida hasta días u horas cuando se usan cargadores domésticos.
La NASA afirma que el nuevo sistema de transferencia de calor podría reducir el tiempo de carga en las estaciones de carga a solo cinco minutos.
La NASA dijo en una publicación de blog: "La aplicación de esta nueva tecnología resultó en una reducción sin precedentes del tiempo requerido para cargar un vehículo y puede eliminar una de las barreras clave para la adopción mundial de vehículos eléctricos".
El gobierno de EE. UU. ha estado aumentando la inversión en la carga de automóviles eléctricos para cumplir su objetivo de instalar 500,000 cargadores de automóviles eléctricos en todo el país para 2030.
La carga lenta y las estaciones de carga poco confiables han sido un problema para algunos propietarios de vehículos eléctricos.