La ONG Coendú (Conservación de Especies Nativas del Uruguay) denunció este sábado que la segunda planta de UPM continúa “contaminando y aniquilando vida en sus alrededores”.
“Esta vez fue una filtración del vertido de lixiviado que alcanzó el arroyo del Sauce, generándole un nivel de pH de 9.1 según información de la propia empresa. Ese nivel está por encima de lo general para la protección y posibilidad de vida de la mayoría de los organismos. ¿Hasta cuándo permitiremos que deterioren nuestra tierra, agua y aire? No nos corresponde meternos en temas económicos o de soberanía, pero todo esto es una entrega de recursos naturales en forma casi gratis a privados extranjeros, y a cambio están destrozando todo lo que está cerca con sus consecuencias”, expresó la organización a través de un comunicado en sus redes sociales.
De acuerdo con Coendú, este episodio se habría dado el pasado martes 18 de junio y la empresa les habría comunicado a las autoridades del gobierno recién el 26 de ese mes.
No obstante, fuentes cercanas a la empresa aseguraron a Montevideo Portal que sí hubo una “contingencia puntual” que se solucionó dentro de las primeras 24 horas, pero “no se trató de un episodio de gravedad”. Asimismo, “fue notificada a las autoridades en su momento”, indicaron.
“Esto, definido de esta manera, consta tal cual los documentos emitidos por Dinacea [la Dirección Nacional de Calidad y Evaluación Ambiental del Ministerio de Ambiente]”, añadieron.
En tal sentido, desde UPM emitieron un comunicado en el que esclarecen el caso:
“El martes 18 de junio, mientras se llevaba adelante la parada general de mantenimiento, y en el marco de monitoreos de seguimiento periódico que se realizan en la planta, se detectó, en un punto ubicado en el arroyo Sauce, una variación de pH de baja intensidad, acotada duración y rápida reversibilidad, sin efectos visibles en la biota. El hecho fue puntual, normalizándose la situación en menos de 24 horas, volviendo los valores a parámetros normales. En los muestreos diarios que se realizaron en el arroyo en días anteriores no se había detectado variación alguna. Dicha variación se debió al escurrimiento de agua proveniente del relleno industrial que estuvo en contacto con residuos inorgánicos no peligrosos”, señala el documento.