Este aumento hasta cifras sin precedentes está ligado al crecimiento de este sector a nivel global, entre otras razones por las restricciones sociales impuestas por la pandemia de coronavirus y el confinamiento impuesto en muchos lugares.

En el ejercicio fiscal que Nintendo cerró a finales de marzo la firma nipona vendió 21,03 unidades de sus consolas Switch. Entre abril y junio pasados vendió un total de 5,68 millones de unidades, en conjunto con la versión híbrida y portátil.

Sin embargo, en mercados como en Japón y Estados Unidos ha habido un incremento en las ventas y están reduciéndose los inventarios, por lo que Nintendo quiere elevar en un 20 % la fabricación de estos equipos.

Gran parte de los componentes de las consolas que vende Nintendo son fabricados en China, recuerda Nikkei, que no identifica las fuentes de la información.

En el primer trimestre de este año hubo problemas en la distribución por la pandemia de coronavirus y ello derivó en el agotamiento de las existencias minoristas.

Con información de EFE