Por The New York Times | Shane O’Neill

La mañana de un lunes de febrero, Harry Hill, de 27 años, llegó al restaurante de la tienda de American Girls vistiendo un suéter vintage de la casa Christian Dior y cargando una bolsa Coach donde llevaba dos de sus amadas muñecas. Se le unió Serena Kerrigan, de 27 años, que tenía sus muñecas en una bolsa de malla rosa de Victoria’s Secret.

Hill, un influente, es un admirador renombrado de American Dolls: ha posado para Instagram en un 7-Eleven vestido de manera idéntica a una de sus muñecas. Se vistió como la muñeca Samantha para Halloween y creó una serie de memes hechos con muñecas de American Girl.

A Kerrigan, también una influente, la vistió su estilista con “Zara de pies a cabeza” —un traje sastre de falda en un verde brillante con puños de plumas. “Soy el M&M verde”, dijo de su atuendo. Como la iteración previa de dicho personaje, la marca personal de Kerrigan puede ser estridente.

La última vez que ella y Hill estuvieron en American Girl Place, Kerrigan hizo un video de TikTok en el que revisaban a su muñeca Samantha en el hospital para muñecas de la tienda para ver si tenía enfermedades de transmisión sexual.

Ellos no son los primeros adultos que visitan ese establecimiento comercial —con sus muñecas— para pasar el tiempo.

“Ven conmigo a ponerte hasta las chanclas en el American Girl Doll Café”, comienza un video de TikTok que se llama “American Girls grow into American Women” (Las admiradoras de las American Girls se convierten en mujeres) de la comediante Sally Darr Griffin.

En el video, Griffin, de 25 años, grita las marcas que lleva puestas —“Vestido de Hill House, gafas Coach”— luego toma el primer trago de lo que serán cuatro mimosas, complementadas con un chorrito de vodka que metió de contrabando en la cafetería de American Girl del centro comercial The Grove en Los Ángeles.

A Griffin se le unieron otras cuatro mujeres de unos 20 años, cada una de ellas acompañada por una muñeca sentada en una silla pegada a la mesa.

“No estaba hasta las chanclas”, aclaró Griffin en una entrevista por Zoom. “Solo es mejor decirlo así por los clics”.

Los clics llegaron. El video de Griffin acumuló más de 600.000 visitas en TikTok, y nació una microtendencia de gente adulta que cena y bebe con muñecas.

No es un concepto totalmente novedoso que los adultos vuelvan a lugares centrados en los niños para una dosis de nostalgia e ironía. Durante décadas, los “goths” iban a Disneylandia en una excursión anual llamada “Día de murciélagos en el parque de atracciones”. Liana Aghajanian, una periodista de Detroit, escribió que celebraba sus cumpleaños en locales de Chuck E. Cheese incluso en la edad adulta como homenaje a sus recuerdos felices de la infancia como una estadounidense de primera generación.

De la docena de locales de American Girl Place, cinco cuentan con restaurantes de servicio completo que sirven roles de canela, macarrones con queso y batidos, además de una amplia carta de postres. El local original de Chicago, que abrió en 1998, obtuvo una licencia completa de bebidas alcohólicas para poder celebrar galas y eventos benéficos. El local de Nueva York es el único otro establecimiento que sirve licor, pero en todos los cafés se sirve cerveza y vino.

Un representante de la empresa dijo que no aprueba que sus muñecas tengan un comportamiento inapropiado para su edad, como consumir alcohol, pero que la empresa da la bienvenida a los aficionados a American Girl de todas las edades.

Jamie Cygielman, presidenta de American Girl, escribió en un comunicado: “Sabemos que nuestros devotos aficionados nunca olvidan los queridos personajes e historias de American Girl con los que crecieron, y estamos encantados de que vuelvan a conectar y rememorar con nosotros de adultos”.

La cafetería neoyorquina, donde Kerrigan y Hill grabaron su contenido para las redes sociales, presenta toques cursis como pequeños moños para atar las servilletas de tela. Las butacas son de color cereza y las paredes, ideales para tomarse fotos, tienen motivos brillantes sobre un blanco nítido. Para algunos adultos, los locales de American Girl Place ocuparon un lugar importante en su psique infantil. Kerrigan, que apareció en un artículo del New York Daily News sobre la apertura de American Girl Place, es aficionada de la marca desde que tenía 4 años.

“Literalmente es mi sueño hecho realidad”, dijo Kerrigan, sobre regresar a la tienda de adulta.

Su acompañante demostró el mismo entusiasmo. “Es Disneylandia para los gays y las chicas literarias”, expresó Hill en una entrevista por Zoom.

La empresa tomó nota del entusiasmo de Hill. En un evento de la empresa de bolsas de viaje Stoney Clover Lane en octubre, Cygielman reconoció a Hill y se presentó. La empresa también lo recibió como invitado en el café de Manhattan hace unas semanas.

En esta ocasión, los dos influentes posaron para selfis, grabaron contenido y tomaron sus teléfonos cuando los meseros les llevaban varios platos que incluían roles de canela, verduras crudas, fideos con mantequilla y palitos de pollo.

La amplia cafetería estaba casi vacía, aparte de otros cinco grupos, cada uno de ellos formado por niños y sus acompañantes. Hill y Kerrigan tomaron asiento, colocaron sus muñecas y brindaron con martinis rosas servidos en vasos con bordes de azúcar rosa.

Para algunos, las 11:30 es temprano para tomar una copa, pero Hill ya había pasado la mañana mezclando agua con zumo de arándanos a fin de que pareciera que bebía cócteles para una publicación patrocinada en Instagram. Esta vez el vodka era de verdad.

El postre fue especialmente adecuado para Instagram: una tarta de capas de arcoíris modelada a partir de un set de juguetes de American Girl, una taza de mousse de chocolate que parecía una margarita en maceta y galletas de azúcar en forma de corazón acompañadas de un kit para hacer tu propio decorado, todo ello servido por un personal muy atento y amable.

La tienda les invitó la comida, como a veces hacen con los influentes, pero Kerrigan insistió en usar su tarjeta de crédito para poder dar una propina al camarero. Cuando ella y Hill empezaron a recoger sus muñecas, un grupo de seis adultos sin ningún niño se sentó cerca.

Estaban de visita desde Austin, Texas, para celebrar el 33.º cumpleaños de Timothy Flitton. Se inspiraron para celebrar su cumpleaños en el American Girl Café después de ver el video de TikTok de Griffin. Al igual que Griffin, pidieron mimosas. Un mesero salió de la cocina con un pastel de cumpleaños en forma de petit four gigante. Flitton y el resto de la comitiva estallaron en aplausos.

Los vítores se apagaron cuando el mesero pasó de largo. El pastel era para una persona sentada detrás de ellos que celebraba su noveno cumpleaños. Personas con sus muñecas American Girl en el American Girl Café de Nueva York, el 7 de febrero de 2022. (Gabby Jones/The New York Times). Harry Hill y Serena Kerrigan comen tarta arcoíris con sus muñecas American Girl en el American Girl Café de Nueva York, el 7 de febrero de 2022. (Gabby Jones/The New York Times).