La edad promedio en los Estados Unidos alcanzó un récord de 38,9 años en 2022, según datos publicados el jueves por la Oficina del Censo del país norteamericano.
El dato refleja un veloz envejecimiento. En 2000, la mediana de edad era de 35 años y en 1980, de 30. Y si bien muchos millennials de 38 años aún pueden sentirse jóvenes, lo cierto es que esa edad promedio es inusualmente alta para el país.
Los nuevos datos se suman a la evidencia de que, al igual que muchas otras naciones, Estados Unidos está envejeciendo, lo que plantea desafíos para la fuerza laboral, la economía y los programas sociales.
Las bajas tasas de natalidad son el principal impulsor del aumento de la edad promedio de la nación, dijeron los expertos.
“Es aritmética simple: están naciendo menos niños”, apuntó Andrew A. Beveridge, presidente de Social Explorer, una firma de datos demográficos, en declaraciones recogidas por The New York Times.
Las tasas de natalidad cayeron abruptamente durante el primer año de la pandemia de coronavirus, pero en realidad desde el comienzo de la denominada Gran Recesión, en 2007, la fecundidad se ha mantenido muy baja en comparación con las generaciones anteriores.
La tendencia es internacional, afectando incluso a países con programas sociales mucho más sólidos que Estados Unidos, como Noruega, Suecia y Finlandia, que subsidian fuertemente el cuidado infantil.
En las naciones industrializadas, es más probable que las mujeres de la generación del milenio prioricen la educación y el trabajo cuando son veinteañeras, lo que las lleva a casarse mayores y tener menos hijos, según el informe
Un análisis estado pr estado arroja que Maine (44,8 años de edad promedio) es el más antiguo, con New Hampshire (43,3) en un cercano segundo puesto.
Utah (31,9), el Distrito de Columbia (34,8) y Texas (35,5) son los más jóvenes, según la Oficina del Censo.
Pese a que la población estadounidense es más vieja que nunca, la nación sigue siendo más joven que sus pares en Europa, donde la edad promedio es de 44 años, comentó Kenneth Johnson, demógrafo de la Universidad de New Hampshire.
Históricamente, la inmigración ha mantenido joven a los Estados Unidos, ya que los inmigrantes generalmente son adultos en edad laboral y, a menudo, tienen más hijos que los estadounidenses nativos. Si bien la inmigración se ha recuperado de los niveles más bajos durante la pandemia, en general se ha desacelerado desde 2016.
A medida que la nación envejece, también se vuelve más diversa. Entre 2021 y 2022, la población asiática del país creció un 2,4 %; la población hispana en un 1,7 por ciento; la población negra en un 0,9 por ciento; y la población blanca en un 0,1 por ciento.
La población de nativos hawaianos de las islas del Pacífico aumentó en un 1,8 por ciento y la población de indios americanos aumentó en un 1,3 por ciento.
Los estados del sur y del oeste han atraído a la mayoría de los nuevos residentes en los últimos años, y esos estados también son algunos de los más dinámicos demográficamente, según los nuevos datos del censo.