Por The New York Times | Natasha Singer
Los habitantes de Luisiana que visitaron Pornhub en los últimos meses se encontraron con una nueva y sorprendente exigencia. Antes de poder ver videos de contenido sexual, tenían que demostrar que tenían al menos 18 años.
Esto se debe a que los legisladores de Luisiana aprobaron el año pasado una ley que exige a quienes publican material en línea que pueda ser “perjudicial para los menores” que comprueben que sus usuarios son adultos.
Luisiana está a la vanguardia de una amplia campaña nacional para aislar a los jóvenes de contenidos potencialmente nocivos y exige al requerir que determinados servicios en línea prohíban o limiten el acceso de menores a sus plataformas. Como resultado, los habitantes de muchos otros estados pronto podrían encontrarse con que ellos también necesitan utilizar credenciales como el permiso de conducir digitalizado para acceder a una serie de servicios, incluyendo las aplicaciones de redes sociales más populares.
Las restricciones propuestas, presentadas por al menos dos decenas de estados en el último año, podrían alterar no solo las experiencias en línea de niños y adolescentes. También podrían modificar por completo el uso del internet para millones de adultos al marcar el inicio de un cambio cultural tectónico que devenga en un mundo en línea más estricto y limitado por la edad.
El aluvión de nuevos proyectos de ley puede suponer un alivio para los padres que temen que sus hijos sean bombardeados con imágenes sexualizadas o sean el blanco de desconocidos en internet. Sin embargo, los grupos de defensa de las libertades civiles afirman que algunos proyectos de ley podrían dificultar a los estadounidenses, incluyendo a los menores, la consulta de información en línea a la que tienen derecho constitucional, por lo que se violarían los principios de la libertad de expresión.
Utah y Arkansas promulgaron hace poco leyes que obligarían a aplicaciones sociales como TikTok e Instagram a verificar la edad de sus usuarios y obtener el consentimiento paterno antes de conceder cuentas a menores. Aunque muchos sitios ya preguntan la fecha de nacimiento a quienes se registran para obtener una cuenta —un sistema de autodeclaración que los menores pueden eludir a menudo al ingresar un año de nacimiento falso—, las nuevas normas estatales podrían llevar a muchas plataformas a instituir sistemas de verificación de edad más estrictos que incluyan documentos de identidad oficiales.
A finales de abril, cuatro senadores estadounidenses presentaron la Ley para proteger a los niños en las redes sociales. El proyecto de ley exigiría a las redes sociales verificar la edad de los usuarios, prohibir el acceso a menores de 13 años y obtener el consentimiento paterno para los usuarios de 13 a 17 años.
Laurie Schlegel, la representante estatal republicana que encabezó la ley de Luisiana, aseguró que se inspiró para actuar el año pasado después de escuchar un pódcast en el que la cantautora Billie Eilish le dijo a Howard Stern que ver pornografía en línea cuando era niña le había “destruido el cerebro”.
Schlegel dijo que creía que el mundo digital necesitaba el mismo tipo de zonas para adultos que existen en el mundo físico, donde a menudo se pide a los consumidores que muestren una identificación del gobierno antes de poder comprar alcohol. Como ejemplo, señaló que en Luisiana se exige a los servicios de apuestas en línea y de envío de alcohol que verifiquen la edad de los clientes mediante credenciales como la licencia de conducir.
“Hemos acordado como sociedad no permitir que un niño de 15 años vaya a un bar o a un club de estríperes”, ejemplificó Schlegel. “Las mismas protecciones deberían existir en internet para saber que un niño de 10 años no está viendo pornografía explícita”.
Schlegel añadió que había elaborado su proyecto de ley de verificación de edad teniendo en cuenta posibles desafíos a la libertad de expresión. Para tratar de evitar afectar a las plataformas de salud, aseguró, la medida de Luisiana toma en cuenta los sitios sexualmente explícitos cuyo contenido cumple con una antigua prueba legal destinada al “material perjudicial para los menores”.
No obstante, los expertos en libertades civiles señalaron que algunas de las restricciones propuestas sobre material perjudicial y sitios de redes sociales podrían crear barreras de verificación de edad para los estadounidenses que buscan acceder de manera libre a la información en línea. Si las normas no se revocan, argumentan estos expertos, podrían alterar de manera radical el internet, convirtiendo el mundo en línea en un mosaico de feudos amurallados o haciendo que las plataformas más populares reduzcan su oferta para evitar entrar en conflicto con las normas.
“Podría crear obstáculos para la libertad de expresión no solo de los menores”, sino cortar el acceso a la información en línea a los adultos, explicó Nadine Strossen, expresidenta nacional de la Unión Americana de Libertades Civiles.
Los grupos de defensa de las libertades civiles dijeron que estaban estudiando la posibilidad de litigar para intentar frenar algunas de las nuevas leyes. Luisiana se erigió en líder nacional del asunto en parte porque ya contaba con una tecnología preconcebida: una aplicación móvil aprobada por el estado, denominada “LA Wallet”, que permite a los residentes escanear digitalmente sus permisos de conducir de Luisiana.
LA Wallet verifica la identidad del usuario con el Departamento de Vehículos Motorizados del estado. Esto permite a los habitantes de Luisiana utilizar la aplicación como lo harían con un carné físico para, por ejemplo, demostrar su edad en un bar.
Tras la entrada en vigor en enero de la ley de verificación de la edad para la pornografía en línea, el número de nuevos usuarios de LA Wallet se triplicó con creces hasta alcanzar los 5200 diarios, según Envoc, la empresa de software de Luisiana que está detrás de la aplicación. Ahora, cuando los usuarios de Luisiana visitan un sitio como Pornhub, este les pide que introduzcan un código único para verificar su edad a través de LA Wallet. La aplicación comprueba entonces la edad del usuario y notifica al sitio de pornografía que la persona es mayor de edad.
El sistema está diseñado para proteger la privacidad, aseguró Calvin Fabre, presidente de Envoc. LA Wallet no envía información personal sobre sus usuarios a los sitios de pornografía, dijo, ni retiene información de los sitios para los que sus usuarios solicitan la verificación de la edad.
Desde que Luisiana promulgó la medida, al menos una decena de otros estados han presentado proyectos de ley similares de verificación de la edad para ver pornografía en línea. Entre ellos está Utah, que también tiene un programa de permiso de conducir digital. Muchos otros estados están probando licencias móviles.
Aun así, existen lagunas. Por ejemplo, para eludir los controles de edad, los habitantes de Luisiana pueden utilizar programas informáticos de enmascaramiento de ubicación, que pueden permitirles fingir que se encuentran en otro estado.
Pero muchos sitios de contenido sexual explícito aún no han establecido sistemas de verificación de edad para los usuarios de Luisiana, dijo Solomon Friedman, socio de Ethical Capital Partners, una firma de capital privado que recientemente adquirió MindGeek, la compañía detrás de sitios para adultos, incluyendo Pornhub.
“Pornhub cumple plenamente la ley, a pesar de que sabemos que en realidad esta no protege a los niños porque muchos otros sitios no la cumplen”, señaló Friedman.
Para fomentar un mayor cumplimiento, Schlegel presentó hace poco un proyecto de ley que permitiría al estado imponer sanciones económicas específicas a los sitios de pornografía que no verificaran la edad de los usuarios.
Algunas plataformas de redes sociales señalaron que estaban intensificando sus esfuerzos por identificar y eliminar a los usuarios menores de edad.
Meta afirmó que había empezado a utilizar herramientas de inteligencia artificial para ayudar a identificar a los jóvenes que mienten sobre su edad en Instagram y Facebook Dating, el servicio de citas de la aplicación. TikTok, que utiliza una variedad de métodos para identificar a los usuarios menores de edad, ha dicho que eliminó más de 75 millones de cuentas el año pasado que parecían pertenecer a niños menores de 13 años. Los estados han presentado de manera reciente un aluvión de proyectos de ley que restringirían el acceso de los jóvenes a sitios de pornografía y las redes sociales o requerirían que ciertos sitios activen la configuración de privacidad más alta para menores de edad. Laurie Schlegel, representante republicana del estado de Luisiana, en el Capitolio del estado en Baton Rouge, Luisiana, el 13 de abril de 2023. (Emily Kask/The New York Times)