Frank McCourt, un billonario estadounidense del sector inmobiliario, quiere quedarse con TikTok para rescatar a internet de las garras de las grandes plataformas de internet que, considera, están destruyendo a la sociedad y poniendo en peligro a los niños.

Court es conocido como el exdueño del equipo de béisbol Los Angeles Dodgers, mientras que en Europa es el propietario del famoso Olympique de Marseille, que tiene entre sus hinchas al presidente Emmanuel Macron.

Por años, McCourt ha advertido que el poder de las grandes plataformas tecnológicas está perjudicando a los niños y llevando al mundo por mal camino.

“Estamos siendo manipulados por estas grandes plataformas. Y por eso es que vemos que en sociedades libres, en todos lados, el mundo parece incendiado. ¿No es así?”, dijo a la agencia AFP durante la conferencia tecnológica Collision de Toronto.

Entre otros, citó la situación en Francia, donde la extrema derecha podría tener una victoria en las próximas elecciones parlamentarias, como el último ejemplo de su percepción.

“Hay mucha agitación, mucho caos, mucha polarización. ¿Saben qué? Los algoritmos están trabajando bien. Nos mantienen constantemente en este estado. Es tiempo de cambiar”, sostuvo.

McCourt contó que su primera motivación para actuar fue la amenaza que las redes sociales representaron para sus siete hijos.

“Este internet es predatorio. Está haciendo un gran daño a los niños. Vemos la ansiedad, la depresión, y una epidemia de suicidios de niños”, enfatizó.

Para resolver el problema, McCourt hace campaña por una “nueva internet” que debería quitar el control de la red de redes a las grandes plataformas como Instagram, YouTube, TikTok, o X.

“Estas plataformas tienen cientos de miles de nuestras características personales, de cada uno de nosotros. Y no es solo dónde compramos o que nos gusta comer o dónde estamos físicamente en un momento dado. Es la forma en que pensamos, nos emocionamos, reaccionamos o cómo nos comportamos”, indicó.

McCourt imagina una nueva internet que describe como descentralizada, donde los usuarios controlan sus propios datos, independientemente de la aplicación de redes sociales que está usando.

Comprar TikTok daría a su proyecto, conocido como Project Liberty, una nueva escala, uniendo a su causa a legiones de usuarios, principalmente gente joven, explicó.

Project Liberty cuenta entre sus miembros al pionero de internet Tim Berners-Lee, al igual que Jonathan Haidt, un profesor de la universidad NYU cuyo último libro, “The Anxious Generation” (La generación ansiosa), argumenta que los efectos de las redes sociales en los jóvenes han sido devastadores.

Antidemocrático

McCourt no es el único que le echó el ojo a la plataforma de origen chino. También el exsecretario del Tesoro de Estados Unidos, Steve Mnuchin, quiere presentar su oferta.

Estos planes siguen a una ley firmada por el presidente Joe Biden en abril que da a TikTok 270 días para encontrar un comprador de fuera de China o enfrentarse a una prohibición en Estados Unidos, por razones de seguridad nacional.

Sin embargo, aún no está claro que TikTok termine a la venta.

La empresa está luchando ante la Justicia estadounidense contra esta ley, y el gobierno chino ha señalado que no aceptará la entrega de una de las marcas de tecnología más exitosas del país.

“La preocupación del gobierno estadounidense es que los datos de 170 millones de estadounidenses se envíen a China”, lo cual, “por supuesto”, representa una amenaza a la seguridad nacional, señala McCourt.

El multimillonario espera que el caso de TikTok permita que las personas “se den cuenta” de que otras plataformas también envían sus datos “a otros sitios”.

“Tal vez no vayan a China, pero (los datos personales) van a otros sitios controlados por alguien que tiene todo sobre ti. Y eso no es correcto. Eso es antidemocrático”, concluyó McCourt.

AFP.