El coronavirus hizo cambiar las estructuras en los diferentes sectores del país. La actividad económica busca sobrevivir, la actividad social está restringida, el transporte público comienza a mermar y la educación busca diferentes rumbos para poder continuar con su actividad.

En primaria, el Plan Ceibal parece ser la herramienta que permite a todos los niños a continuar con sus clases. Ahora, el estudio terciario, o popularmente conocida como la facultad, también busca sus métodos para continuar con normalidad los cursos.

La Universidad Católica del Uruguay (UCU) comenzó este lunes con los cursos online. Una herramienta que permite conectar a todos los estudiantes con sus profesores y desarrollar la clase evitando las aglomeraciones, un formato que está restringido en estos momentos de coronavirus.

Montevideo Portal se comunicó con la vicerrectora de Programas Académicos de la UCU, Mónica Arzuaga, para conocer cómo fue el primer día de clases. "Estamos muy conformes, contentos y orgullosos de lo que sucedió hoy en nuestra universidad. Vivimos una jornada de mucho entusiasmo, transmitido por nuestros profesores y estudiantes. Para todos, este contexto nos resulta un desafío grande. La universidad anunció al mismo tiempo una suspensión de las clases por una semana y la vuelta a clases de hoy en modalidad a distancia. Sabíamos que la exigencia era alta, pero teníamos la confianza de poder lograrlo. Hoy los cursos se reiniciaron sin dificultades", aseguró Arzuaga.

Contó además, que el promedio general de la Católica este lunes fue del 76% porque las carreras que tienen un componente "clínico y de prácticas externas" no comienzan esta semana.

Consultada sobre cómo se prepararon ante esta emergencia sanitaria y el poco tiempo de restablecerse, Arzuaga señaló que desde hace dos semana, varios equipos están trabajando "en torno a varios ejes". Por un lado, estaba el aseguramiento de las condiciones tecnológicas y técnicas. Para ello reforzaron los acuerdos con las plataformas de educación a distancia más reconocidas a nivel mundial, hicieron simulacros y protocolos, y entrenaron a una red de técnicos para la atención remota completa.

"Por otro lado, estaba la necesidad del desarrollo de las competencias didácticas. Mapeamos y agrupamos la totalidad de cursos y de profesores de la UCU, de acuerdo con sus particularidades. Para cada grupo, diseñados estrategias de capacitación masiva y de apoyo personal. Una red de especialistas en docencia virtual está atendiendo los 7 días de la semana en forma remota", aseguró Arzuaga.

"También acompañamos a los estudiantes para la integración rápida a la modalidad en línea. Comunicamos las indicaciones para estudiantes y profesores, vía mail, redes sociales y creamos un minisitio con todo lo necesario para apoyarlos en esta transición, como tutoriales y recursos digitales para la preparación de las clases a distancia.También realizamos ajustes de los sistemas académico-administrativos como normas de clases, ciclos de clases, ejecución de actas, etc. a la nueva modalidad a distancia", agregó.

Finalmente, según contó la vicerrectora, el siguiente paso es "acompañar" a los profesores cuyos cursos, por su modalidad, son más complejos para realizar en línea, como son las clínicas, laboratorios y prácticas en la comunidad.

Por último, contó que para su Webasignatura utilizaron la plataforma Moodle y para las clases online utilizaron Zoom.